Especialistas en oficios de toda la vida que siguen elaborando artesanalmente sus productos en Andalucía. Como una especie protegida para evitar su extinción, en la comunidad autónoma andaluza se pueden visitar diez Zonas de Interés Artesanal, actividades con características propias y diferenciadas, tanto por los procesos de elaboración del producto, basados en el uso de materias primas y técnicas autóctonas, como por las características de los talleres y de los propios artesanos, en la mayor parte de los casos muy vinculados a la tradición familiar.
Distribuidos por siete de las ocho provincias andaluzas, estos lugares donde la artesanía cobra un especial significado como un activo patrimonial, histórico y cultural, se ofrecen al visitante también como un reclamo turístico. De hecho, la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía, que ha puesto en marcha el Plan para el Fomento de la Artesanía 2014-2017, ha propuesto crear unas rutas turísticas para crear productos turísticos en base a la riqueza artesanal de cada uno de estos territorios. Aquí están los artesanos en el mapa andaluz.
1. Macael-Valle del Almanzora (Almería)
Declarada como Zona de Interés Artesanal en noviembre de 2013, Macael y la comarca del Valle del Almanzora constituyen la primera zona de la provincia almeriense en obtener este reconocimiento, promovido a petición de la Asociación de Artesanos de la Comarca del Mármol.
Esta zona agrupa a 15 talleres, de los que todos, menos uno dedicado a alfarería, son de talla de piedra y mármol. Por municipios, 9 de estos talleres artesanales se ubican en Macael, 2 en Olula del Río, otros 2 en Fines, 1 en Albox y 1 más en Cantoria.
2. Ubrique, El Bosque, Benaocaz y Prado del Rey (Cádiz)
Esta zona artesanal gaditana obtuvo su certificación en enero de 2012 y es conocida por sus trabajos con cuero y marroquinería, referencia a nivel internacional de este oficio artesano.
De hecho, están certificados en este territorio 39 talleres, de los que 29 corresponden a la fabricación de artículos de marroquinería, 2 al rebaje de cuero y pieles, 2 a la fabricación de artículos de piel, 2 a carpintería, 1 a la fabricación de albardas, 1 a la curtiduría, 1 al repujado de cuero y 1 más a la elaboración de muebles de madera y mimbre.
3. Valverde del Camino (Huelva)
Los artesanos de este municipio onubense obtuvieron su certificación como Zona de Interés Artesanal en junio de 2013, una de las dos primeras otorgadas por la Junta de Andalucía.
Esta zona comprende 13 talleres artesanales, 5 de ellos dedicados a trabajos de carpintería, 4 a la elaboración de calzado, 3 a la marroquinería y 1 de tapicería.
4. Vélez-Málaga (Málaga)
La única Zona de Interés Artesanal de Málaga se encuentra en este municipio donde han sido certificados un total de 14 talleres artesanos. El visitante puede encontrar allí a 9 especialistas en cerámica, 2 creadores de vidrieras artísticas, 1 dedicado a los bordados, 1 de modistería y 1 más de ladrillería.
5. Granada
El turista que visite Granada capital debe saber que acoge también una certificación propia como Zona de Interés Artesanal, al conservar una decena de talleres de oficios manuales.
Entre ellos destacan 2 talleres de trabajo de joyería, 1 de cerámica, 1 de elaboración de perfumes y jabones, 1 de construcción de instrumentos musicales, 1 de marroquinería , 1 dedicado a la elaboración de esmaltes al fuego, 1 especialista en taracea, 1 ebanistería artesana y 1 más dedicado a la elaboración de vidrio soplado.
6. Úbeda (Jaén)
Declarada como Zona de Interés Artesanal en diciembre de 2012, se reconoce a Úbeda como lugar donde sobreviven oficios artesanos de distintas especialidades con una elevada calidad artística, donde se conjugan la tradición con los nuevos diseños.
Quien visite Úbeda podrá encontrar 11 talleres artesanos, 6 de los cuales están dedicados a la alfarería, 2 especializados en forja y herrería, 1 en la creación de artesonados mudéjares, 1 dedicado a las vidrieras artísticas y 1 más de joyería.
7. Zoco Municipal de la Judería de Córdoba
En un recinto propio situado en pleno barrio de la Judería de Córdoba se conservan una serie de talleres que crean un espacio artesanal propio en una de las zonas más visitadas de Andalucía.
Entre los talleres de oficios artesanales que se encentran certificados en este espacio, el visitante puede encontrar productos de cuero, marroquinería, cerámica, madera, cartón piedra, joyería y filigrana.
8. Comarca de Los Pedroches (Córdoba)
Aunque la Comarca de Los Pedroches suele ser conocida por su producción agroalimentaria ligada a la dehesa, también acoge una Zona de Interés Artesanal que rescata oficios manuales.
Distribuidos en ocho municipios de la comarca, el visitante puede encontrar 17 talleres de trabajos artesanos: Añora, con 2 talleres de carpintería y forja; Cardeña, con un taller de cerrajería; El Viso con 3 talleres de marroquinería, forja y calzado; Hinojosa del Duque con otros 3 talleres de trabajos en piedra y mármol, cantería y taxidermia; Pozoblanco con 3 talleres más de talla de madera, herrería y forja; Santa Eufemia, con 1 taller de ebanistería; Villaralto, con 1 taller de trabajos en piedra y mármol; y Villanueva de Córdoba, con 3 talleres de trabajos de carpintería y curtiduría.
9. La Rambla (Córdoba)
La Rambla y sus artesanos fueron una de las zonas primeras zonas de Andalucía declaradas como de Interés Artesanal.
Esta localidad, reconocida por su dedicación a la cerámica y alfarería, que celebra cada año una exposición de los trabajos de todo el municipio y tiene en esta industria su principal valor económico, conserva también la manera tradicional de hacer a mano sus piezas.
En La Rambla, el visitante puede visitar hasta 25 talleres dedicados a la producción de cerámica y otros 14 específicos de alfarería.
10. Castro del Río (Córdoba)
Declarada como Zona de Interés Artesanal en diciembre de 2012, esta localidad de la provincia cordobesa cuenta con la Asociación de Artesanos de la Madera del Olivo que promueve su protección y es el estandarte de la producción artesana de Castro del Río.
En la localidad se encuentran 8 talleres de trabajos manuales, 6 de ellos dedicados a la fabricación de muebles de madera de olivo, 1 a la forja y 1 más de alfarería, y en ellos se mantiene, tanto sus técnicas y herramientas de trabajo tradicionales, como una estructura gremial, con maestros, oficiales y aprendices, que data del siglo XIX.