El PSOE convoca al presidente del Consejo de Doñana al Parlamento por la ley de regadíos para sortear el veto de PP y Vox

El PSOE ha registrado este jueves en el Parlamento andaluz una solicitud de comparecencia de Miguel Delibes en la comisión de Medio Ambiente para “informar sobre el cumplimiento de las normas que afecten al Estado Natural de Doñana”. El objetivo de los socialistas es sortear el veto de PP y Vox al presidente del Consejo de Participación de Doñana en la comisión de Fomento, que es el órgano que evaluará y aprobará la ley para ampliar regadíos en el entorno del Parque Natural.

El equipo de Juan Espadas ha buscado un resquicio en el reglamento de la Cámara para intentar que Delibes acuda al Parlamento a exponer su criterio -conocidamente contrario- a la polémica proposición de ley de regadíos que defiende el Gobierno de Juan Manuel Moreno. El Parlamento reactivó este miércoles la tramitación de la norma con la aprobación de la lista de comparecientes que acudirán a exponer su punto de vista sobre el texto legal el próximo 13 de junio. Delibes y otros científicos y ecologistas críticos con la ley fueron propuestos por los tres grupos de izquierdas en la oposición, y apeados por la mayoría de PP y Vox.

Los socialistas calificaron el veto a Delibes de “cacicada” y, 24 horas después del portazo de la comisión de Fomento, han registrado la solicitud de comparecencia en la comisión de Medio Ambiente. Este órgano no trata la proposición de ley, porque PP y Vox (y la propia Junta) defienden que el objetivo de la misma es la reordenación del territorio, es decir, la recalificación de terrenos que ahora son de secano y pasarían a ser de cultivo, pero sin permisos de riego, porque eso depende de otra administración: la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, dependiente del Gobierno central.

Los grupos de izquierdas siempre han reprochado al Ejecutivo de Moreno que tramitara una ley para regular regadíos ilegales en la corona norte de la reserva natural, pretendiendo que “no afecta ni a la política ambiental, ni de aguas, ni a la conservación del Parque Nacional”.

La estrategia del PSOE andaluz es de corto recorrido, en realidad, porque el PP también cuenta con mayoría absoluta en la comisión de Medio Ambiente, y previsiblemente rechazará la solicitud de comparecencia de Delibes, aunque el artículo 44 del reglamento de la Cámara permite “requerir la presencia” de autoridades para que “informe acerca de los extremos sobre los resultados que fueran consultados”. La decisión de la comisión, presidida por los populares, no se conocerá hasta final de mes.

“Es triste y penoso”

Miguel Delibes no ha sido citado a comparecer el próximo 13 de junio ante la comisión parlamentaria que evaluará la polémica proposición de ley. El presidente del Consejo de Participación del Parque Natural, el director de la Estación Biológica de Doñana, Eloy Revilla, y un miembro de la Unesco, entre otros, aparecían en el listado de propuestas de las tres izquierdas -PSOE, Por Andalucía y Adelante-, pero PP y Vox han impuesto su mayoría para dejarles fuera.

Los populares y Vox han excluido a muchos de los comparecientes que ya visitaron el Parlamento la pasada legislatura, cuando se tramitó la primera iniciativa legislativa sobre regadíos en el entorno de Doñana. La ausencia más llamativa es la de Delibes, que preside desde hace años el órgano donde están representados todos los actores implicados en la conservación del Parque Nacional, incluidas las administraciones. “Es triste y penoso que no se escuche el criterio del Consejo de Participación”, se ha lamentado, en una entrevista con El País.

El Consejo de Participación de Doñana es quien debía recoger y analizar el proyecto de ley que permitirá recalificar tierras de secano próximas a la reserva natural para que puedan acceder a permisos de riego agricultores que vienen esquilmando el acuífero de Doñana desde hace años. Sin embargo, la Junta decidió tramitar la iniciativa a través de los grupos parlamentarios que la sustentan -PP y Vox-, esquivando así la obligación de escuchar el informe preceptivo de dicho órgano.

Moreno ya sabe la opinión de Delibes, la conoce de primera mano -él mismo ha reconocido que le telefoneó para expresarle su rechazo frontal personalmente- y la conoce por su rotunda comparecencia parlamentaria, hace un año: “Esta proposición me parece irresponsable, desleal, frívola, irritante, inconsistente, un sinsentido”, dijo.

Delibes advirtió a la Cámara que la iniciativa iba a “agitar el avispero” de la comarca onubense, desatando el enfrentamiento de unos con otros -agricultores legales con ilegales, alcaldes, ecologistas, autoridades locales y europeas-, para concluir que “se está dañando a Doñana”. “Conceder terrenos regables sin agua es hacerse trampas al solitario, es alimentar la tensión, es confrontar y querer enfrentar a papá y mamá para cabrear a los niños”, sentenció.

Cuando hizo esta denuncia en el Parlamento, hacía apenas un mes que Miguel Delibes había recibido la Medalla de Andalucía de manos del propio Moreno, que reconoció su compromiso medioambiental, y luego escuchó cómo éste alertaba en términos muy duros sobre la ley de regadíos.