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La plantilla de la productora encargada de los informativos de Aragón TV afronta su segundo “Jueves Negro”

Los trabajadores y trabajadoras de CHIP Audiovisual, la empresa del grupo Henneo que lleva a cabo los programas informativos, deportivos y el Tiempo para Aragón TV, afronta este jueves, 14 de junio, su segunda jornada reivindicativa. Su objetivo, explican, es “visibilizar la situación de precariedad laboral en la que ejercemos nuestro trabajo”.

Tras un primer “Jueves Negro”, que secundó la práctica totalidad de la plantilla, la empresa se ha puesto en contacto con los representantes de los trabajadores para fijar una reunión. Sin embargo, dicen los trabajadores, “el incumplimiento, por su parte, de una de las exigencias del Comité para este encuentro, lo deja en el aire”.

Por eso, este jueves se están volviendo a repetir “las medidas de presión” acordadas por la plantilla: “No utilizar el teléfono personal para temas laborales, negarnos a recibir órdenes de personas ajenas a la empresa y vestir de negro durante todo el día”. A esto se acompaña una jornada de protesta en las redes sociales bajo la etiqueta #juevesnegrosATV.

Modelo de externalización

Recuerdan que hace dos años la televisión autonómica apostó por este modelo de externalización informativos, deportes y el tiempo. Estos tres bloques, apuntan, se han erigido como “el puntal del canal, obteniendo una media del 25 % de audiencia, muy por encima del 8 % de media de la cadena”. Sin embargo, “las condiciones laborales de los trabajadores que llevamos a cabo estos programas no gozan del mismo reconocimiento”, señalan.

Sobre la mesa ponen “unos salarios desiguales, bajos y prácticamente congelados, una compensación económica exigua por trabajar en fin de semana y las dificultades para conciliar la vida laboral y familiar”. A ello se une “una carga de trabajo cada vez mayor debido a la escasez en la plantilla, las constantes eventualidades de muchos compañeros y la precariedad en los medios técnicos”. Lo que conlleva, en sus palabras, que se encuentren con con una plantilla insuficiente, formada en buena parte por trabajadores con contratos absolutamente precarios en su duración y compensación“.

Asimismo, dicen, “se abusa de la disponibilidad de los trabajadores, obligando a constantes prolongaciones de jornada y modificando en exceso sus turnos de trabajo. No se invierte lo suficiente en medios técnicos, con los problemas que ello conlleva y poniendo incluso en riesgo la salud de los trabajadores. A ello se suma la dificultad del Comité para abordar cualquier negociación con la empresa”.

“Una dirección sin ánimo de mejorar”

Aseguran que se encuentran “con una dirección sin ánimo de mejorar las condiciones de sus trabajadores y que solo se fija en los criterios económicos. Entendemos que esto, además de empeorar el ánimo y la salud de la plantilla, repercute en la calidad del servicio. Junto a esto, queremos denunciar lo que consideramos un incumplimiento del modelo de subcontratación elegido por Aragón TV, quedando a menudo distorsionado el organigrama de la empresa contratante y la prestadora de servicios”.

El modelo escogido, apuntan, “debe ajustarse a normativa laboral y establecer esos límites. De lo contrario, se cae en la perversión de que Aragón TV obtiene lo mejor del modelo (excelentes audiencias a módico precio) pero no así los trabajadores de CHIP, que vemos como nuestras condiciones distan mucho de parecerse a las de la plantilla del personal laboral de la televisión autonómica”.