El Gobierno de Aragón, el PSOE de la Gestora y la Fuente de los Incrédulos

Pues sí, vaya título tan largo. Pero ¿cómo explicar a la ciudadanía lo que está ocurriendo con los presupuestos del Gobierno de Aragón de una manera sencilla?

Como casi todas las cosas en esta vida, la situación que vivimos con los presupuestos de Aragón de 2017 tiene dos explicaciones, una corta y una larga. La corta viene a ser que el presidente del Gobierno, Javier Lambán, y su consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, han intentado utilizar a Podemos para hacerse las “fotos progresistas” y garantizar la estabilidad de su Gobierno en nombre de la izquierda. Lo hacían mientras las cositas de fontanería -la política responsable que le llaman; o sea, las modificaciones presupuestarias; o sea, los recortes a la dependencia, a la educación pública, etc.- y las cuestiones estratégicas, como el techo de gasto de los presupuestos estatales, el déficit autonómico o la investidura de Rajoy, se pactan, con el corazón tranquilo y lágrimas de cocodrilo, con el Partido Popular.

El problema del Gobierno consiste en que, en apenas un año y medio, ha agotado toda la credibilidad que necesita para que confiemos desde Podemos en su compromiso de cara a los presupuestos de 2017. Ya hemos visto lo que vale su palabra en los de 2016.

Por esta razón, Podemos no ofrece ni un voto en contra -somos conscientes de que hay unas líneas básicas que deberían salir adelante- ni un voto a favor -somos más conscientes aún de que tenemos proyectos diferentes y la palabra de este Gobierno solo vale cuando pacta con la derecha- a los presupuestos de este año que entra.

Hasta aquí, la explicación corta de por qué nos encontramos es esta situación de cara a la aprobación de las cuentas autonómicas de 2017. Para la explicación larga nos hemos visto inspirados por nuestro presidente cuando hace unos días regalaba al ministro de Fomento una reproducción de la Fuente de los Incrédulos, una muestra del escepticismo del Ejecutivo aragonés ante el Gobierno español.

El Gobierno liderado por Javier Lambán arrancó su andadura en junio de 2015 intentando hacer valer su condición de alternativa al PP en Aragón como base de su credibilidad. Sentarse a una mesa con Podemos para acordar los compromisos de investidura condujo al PSOE a creer que existía un pseudogobierno conformado por las fuerzas que apoyamos su investidura. Un extremo que, desde Podemos, siempre negamos: apoyar la investidura era un gesto de responsabilidad para desalojar el nocivo Gobierno de Luisa Fernanda Rudi, no una confianza en Javier Lambán de la que la experiencia de sus años al frente de la Diputación Provincial de Zaragoza -la experiencia de la vieja política- no le hacía acreedor. Para suplir esa falta de confianza le dimos la Presidencia a cambio de 10 medidas programáticas a desarrollar durante los seis primeros meses de gobierno, que no se han cumplido en buena parte. Esto ha creado una situación paradójica en la que el Ejecutivo aragonés ha abandonado la responsabilidad de tirar del carro político con su acción de gobierno, esperando en cambio que las políticas progresistas llegaran por ciencia infusa.

Esta inacción se ha afianzado como norma a medida que pasan los meses. El siguiente hito de lo inaudito ha sido el acuerdo que hizo posible tener presupuestos en 2016, que aprobamos con la introducción de algunas partidas que fueron bautizadas como “topos morados”. De nuevo un compromiso para que no se prorrogara su último presupuesto del Gobierno de Rudi.

A pesar de todo esto, en Podemos Aragón vamos a seguir empeñados en que cualquier política que se pacte con nosotros responda a los intereses de las mayorías sociales aragonesas y no al club de las oligarquías. Por eso somos molestos, por eso la crítica y el desgaste. Porque hemos roto con el papel del turnismo en esta tierra donde se está pidiendo un cambio a gritos, donde la gente, a pesar del tono autocomplaciente del ejecutivo de Lambán, sigue pasándolo mal, donde la realidad nos golpea con datos escalofriantes de desempleo, desigualdad, precariedad y pobreza. Donde la sanidad, la educación y derechos sociales como la dependencia necesitan un fuerte impulso. Donde los trabajadores, autónomos y microempresas siguen bajo la bota de los intereses oligárquicos. Hay un futuro por conquistar. ¿Puede hacerse bajo el liderazgo del PSOE de Aragón de la Gestora? La respuesta está en la Fuente de los Incrédulos.

*Román Sierra, secretario de Organización de Podemos Aragón. @roman_nin

*Lorien Jiménez, secretario Político de Podemos Aragón. @desiertodesara