El PP alcanzaría al PSOE en Aragón y lograría empatar con el partido de Javier Lambán a 23 escaños, aunque eso deja a ambos lejos de los 34 necesarios para alcanzar la mayoría absoluta. El PP no llega con Vox y el PSOE no puede repetir su acuerdo de 2019. Ambos necesitarían, al menos, a la nueva formación que irrumpiría con fuerza en el Parlamento autonómico: la coalición Aragón Existe-Teruel Existe, que con sus entre cinco o seis escaños sería decisiva para romper el empate y tendría la llave del próximo Gobierno.
El Partido Aragonés (PAR), formación histórica que ha sido siempre determinante para la configuración de ejecutivos en la comunidad autónoma –ha gobernado en coalición en ocho de las 11 legislaturas–, donde nunca ha ganado nadie con mayoría absoluta, desaparecería de las Cortes. Los aragonesistas sufren un severo castigo por la crisis interna que vive desde hace un año y medio y que se ha saldado con la caída de su presidente tras una moción de censura interna, dos escisiones que han formado nuevos partidos y la integración de una parte de sus miembros en el PP y Ciudadanos.
Según la encuesta de Simple Lógica para elDiario.es Aragón, la subida de siete escaños de los populares, que sería el partido más votado con un 29,6% de los votos, no sería suficiente para ganar las elecciones a un PSOE que resiste con un 28,2% de los votos y tan solo perdería un diputado respecto a la composición actual del parlamento.
Pero ni uno ni otro tendrían fácil encontrar apoyos. Los socialistas de Javier Lambán, que actualmente gobiernan gracias a un cuatripartito con CHA, Podemos y PAR, no revalidarían la mayoría con estas formaciones y tampoco lo haría el PP con los seis o siete diputados de Vox, que con un 9,9% de los votos duplica su resultado actual. Los populares tampoco lograrían la mayoría incorporando a una posible coalición con Vox al único diputado que mantendría Ciudadanos. Esta formación sufriría la mayor caída, ya que pasaría de 12 diputados a uno solo, pero aún así mantendría representación parlamentaria y obtendría un 3,76% de los votos.
Izquierda Unida, que en Aragón se presenta en solitario, mejora sus resultados y aumenta su representación de uno a dos escaños con un 4,9% de los votos. La Chunta Aragonesista (CHA) mantendría la representación actual, con tres escaños y un 6,3% de los votos, y Podemos pasaría de cinco a tres con un 5,4% de las papeletas. .
Con estos resultados, la llave de la gobernabilidad pasaría por una coalición que concurre por primera vez a las elecciones autonómicas, la formada por Teruel Existe y Aragón Existe. Obtendría entre cinco y seis escaños y un 7,4% de los votos, y su defensa de la transversalidad y la búsqueda de acuerdos por objetivos le convierte en el socio deseado e imprescindible tanto para el PP como el PSOE si cualquiera de ellos quiere formar gobierno.
La coalición –cuyo candidato a presidir el Gobierno es el actual diputado en el Congreso por Teruel Existe, Tomás Guitarte– ya ha mostrado su predisposición a hablar con cualquiera que acepte sus condiciones basadas en un nuevo modelo de desarrollo que luche contra la despoblación y vertebre la comunidad autónoma. Sin embargo, las negociaciones no se antojan sencillas, ya que hay varios condicionantes que las complican: por un lado, la mala relación que ha mantenido el PSOE aragonés con Teruel Existe durante toda la legislatura. Por otro, el rechazo de Aragón Existe a participar en negociaciones con Vox. Además, tiene varias líneas rojas que forman parte de los programas de PSOE y PP; tanto el modelo de implantación sin control de las energías renovables en el territorio y el proyecto de unión de estaciones de esquí por el valle de la Canal Roya, muy cuestionado socialmente y que muchos organismos científicos consideran inviable por su impacto ambiental y la pérdida de nieve en los próximos años.
De este modo, Aragón Existe se antoja decisivo para romper el empate de los dos grandes bloques ideológicos: por un lado, el PSOE con CHA y Podemos que sumarían 29 escaños; y el del PP con Vox, que sumaría otros 29. Ambos muy lejos de la barrera de los 34 de la mayoría absoluta. El primer bloque tampoco la alcanzaría incorporando los dos diputados de IU, que esta legislatura ha sido el único partido de izquierdas en la oposición; ni la lograría el PP sumando el único diputado que mantiene Ciudadanos.
Lambán, el más conocido y el mejor valorado, pero con un aprobado raspado
El actual presidente de Aragón, Javier Lambán, que opta a su tercer mandato como presidente, es el candidato mejor valorado y más conocido por el electorado. Un 50% aprueba su candidatura y el 91% de los votantes le conocen. Tan solo su mayor adversario, el popular Jorge Azcón, se acerca algo en grado de conocimiento y valoración. El todavía alcalde de Zaragoza y secretario general de los populares aragoneses da el salto a la política autonómica: el 40% de los votantes lo aprueban y casi el 82% lo conoce.
Muy por detrás, los líderes de CHA y de Podemos, que repiten candidatura y ambos han formado parte del Gobierno de Javier Lambán esta legislatura. José Luis Soro recibe la aprobación del 25,2% del electorado y le conoce el 54% del electorado. La dirigente de Podemos, Maru Díaz, es aprobada por el 18,4% y su nivel de popularidad es del 48%. Tomás Guitarte, que debuta en unas elecciones autonómicas, tiene un nivel de popularidad del 42,5% y lo aprueba el 16,9%.
También repite el candidato de IU, Álvaro Sanz, y a pesar de que la formación mejora notablemente sus resultados tan solo le aprueba el 6,9% y es conocido por el 24,2% de los votantes. Alberto Izquierdo, del PAR, Carlos Ortas de Ciudadanos y Alejandro Nolasco de Vox se estrenan como candidatos a la presidencia por estas formaciones y tienen un grado de popularidad y aprobación muy bajo.