Las obras en el centro de crisis 24 horas de atención a víctimas de violencia sexual en Zaragoza encaran su recta final. El espacio iniciará ahora la fase última de equipamiento, de tal manera que se espera su apertura en unas semanas, en cualquier caso “antes de que finalice el año como nos comprometimos desde el Gobierno de Aragón”, según ha anunciado este jueves la vicepresidenta del Gobierno de Aragón, Mar Vaquero.
Vaquero, consejera de Presidencia, Economía y Justicia, Departamento donde se encuadra el Instituto Aragonés de la Mujer, ha querido conocer de primera mano la marcha de las obras del centro de crisis de la capital aragonesa que en unas semanas comenzará a funcionar como centro de atención a mujeres víctimas de violencias sexuales.
Este nuevo equipamiento del IAM se ubica en el centro de la ciudad, concretamente en la calle Manifestación 18. “Hay que agradecer el esfuerzo que ha realizado todo el equipo para poder cumplir con estas fechas, de todas aquellas personas que han trabajado en el diseño y en la preparación de este edificio cuya financiación procede de fondos europeos”, ha dicho Vaquero.
“Aquí lo que se ha conseguido es tener diferentes espacios para atender a las víctimas, pero también para poder trabajar en la formación, en la concienciación, en la asistencia... Y por supuesto en esos primeros momentos en que se producen este tipo de violencias en las que necesitan asesoramiento psicológico y jurídico tanto las víctimas como sus familiares”, ha añadido.
Dos plantas y 470 metros cuadrados
El espacio dispone de 470 metros cuadrados divididos en dos plantas y su construcción se ha financiado con fondos del Mecanismo Europeo de Recuperación y Resiliencia (MRR), por importe de 1.160.201 euros. En estas instalaciones, además del equipamiento necesario para las atenciones a las víctimas, también hay una sala de exposiciones, una sala de formación y una biblioteca.
En la planta calle, con acceso desde la calle Manifestación, se ubicará la recepción, la sala de espera, tres salas de atenciones individualizadas y un espacio de divulgación. En la planta sótano se abrirá un espacio multifunción --charlas y formaciones dirigidas tanto a profesionales como a personal de la administración y comarcas-- y una biblioteca con oficina diferenciada, así como los espacios de instalaciones y almacén. En el centro trabajarán cuatro personas.
En el proyecto de Caivis Zaragoza se ha querido respetar la esencia de un edificio de más de 100 años que se puede apreciar fundamentalmente en el sótano, donde se han recuperado las paredes y las carboneras de la época.
“Desde enero hasta aquí no hemos parado de trabajar ni un momento, no solo en lo que es la estructura del edificio sino en todo lo que va asociado al centro como los contratos de servicios, la ampliación de la línea 900 en la que hemos pasado de un contrato de 308.000 euros a uno nuevo de más de 700.000. Todas las personas que estén atendiendo, los profesionales, los trabajadores sociales y los psicólogos, van a tener un refuerzo muy importante y eso se va a notar a la hora de recibir las llamadas”, ha explicado la directora del Instituo Aragonés de la Mujer, María Antoñanzas.
El Gobierno de Aragón se encargará de la gestión
También hay una importante ampliación del convenio con el colegio de abogados, “que son los que van a dar todo el asesoramiento a las mujeres víctimas y también a los menores”, ha manifestado Antoñanzas, que ha recordado “que estamos hablando de un centro que atiende también a los menores de 12 años y donde no nos queremos olvidar de que las violencias sexuales digitales están en emergiendo con unos datos preocupantes a los que tenemos que ser capaces de dar respuesta”.
Una vez que abra sus puertas será el Gobierno de Aragón el encargado de su gestión, a través del Instituto Aragonés de la Mujer. El contrato de servicios de Zaragoza va a ser de 506.958 euros, a los que habrá que añadir los gastos de mantenimiento de este centro de crisis que supòne contar con un recurso especializado que prestará atención jurídica, psicológica, social y educativa.
De hecho, ya se encuentra instalada la primera exposición sobre violencia sexual que se podrá ver en la sala de exposiciones del Caivis Zaragoza y que posteriormente se podrá trasladar a otros equipamientos de la comunidad para sensibilizar sobre la violencia sexual.
“Cuando este centro se encuentre a pleno rendimiento, junto a los de Huesca y Teruel, se duplicarán el número de profesionales que actualmente trabajan en el IAM, mejorando notablemente la atención que se presta a mujeres víctimas de violencias machistas”, ha explicado la directora del IAM, que ha recalcado que esto “no solo supone un salto cuantitativo importantísimo, sino también cualitativo, ya que estos espacios están creados para acoger de la forma más idónea a las víctimas”.
Centro de referencia
También será para la ciudad un centro de referencia para actividades formativas, educativas, culturales y de sensibilización sobre cualquier asunto relacionado con la violencia contra la mujer y la promoción de la igualdad.
“Queremos potenciar también una colaboración institucional con el Ayuntamiento de Zaragoza. Al igual que en Huesca y Teruel hay que potenciar esa colaboración con todas aquellas instituciones que prestan y ofrecen servicios en este ámbito. Igualmente queremos hacerlo dentro del propio Gobierno de Aragón con la Consejería de Educación para trabajar en la formación en la concienciación de la igualdad y con la de Bienestar Social y Familia, donde están la Dirección General de Igualdad de Oportunidades y el Instituto Aragonés de la Juventud”, ha afirmado la vicepresidenta.
Estos equipamientos son espacios fácilmente accesibles y reconocibles, si bien siempre mantendrán la privacidad de las usuarias. Dispondrán de atención telefónica y telemática --web, chat y Whatsapp-- para atención de urgencias 24 horas y también atención de aquellas mujeres que no quieran acercarse al centro por motivos de seguridad o privacidad.
Además, se está ultimando la compra de tres viviendas, de tal manera que cada uno de los tres centros contarán también con un piso vinculado a cada uno de ellos. Servirá como alojamiento temporal de emergencia en caso de haber sufrido una agresión sexual y no disponer de un recurso habitacional.
Para facilitar el acceso al servicio desde el ámbito rural, los profesionales se podrán trasladar a los diferentes puntos de la geografía para dar atención a la víctima que lo solicite. En caso de que desee trasladarse al centro de crisis, los desplazamientos se incluirán dentro de su atención.
El Gobierno de Aragón ha mostrado su firme compromiso en la protección de las víctimas de violencia machista durante este año 2024 con un trabajo en tiempo récord para poder abrir estos espacios.
En este periodo se ha procedido a la elaboración de contratos y seguimiento de obras de los tres centros; la adquisición de tres viviendas --una en cada capital--, que estarán vinculadas a los Caivis; el amueblamiento de los centros y el equipamiento informático; la puesta en marcha de la nueva web, que funcionará como un cuarto centro virtual; el nuevo contrato de la línea 900 con ampliación de la cobertura actual.