Suele ser habitual en estas fechas que los hospitales reciban una avalancha de pacientes de Urgencias, debido, sobre todo, a la gripe. Pero este año las previsiones se han quedado cortas: en algunos casos faltan camas, en otros, profesionales. Es el caso del Hospital Provincial de Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza, donde solo hay un facultativo de guardia para las urgencias. Algo que complica la situación a diario y la lleva a un punto crítico cuando es festivo.
En un día normal su guardia comienza a las 15:00 horas y termina a las 8:00 horas del día siguiente; pero cuando es festivo el servicio es de 24 horas. Estos profesionales aseguran que en algunos días de la pasada Navidad han estado recibiendo alrededor de 90 urgencias: “Es imposible atender bien a 90 personas en 24 horas. Nuestras condiciones de trabajo afectan a los pacientes”. La situación, dicen, “es inasumible, no tienes tiempo ni para comer”.
En su opinión, el motivo, además de la gripe, es que cada vez va más gente a ese hospital, “porque saben que las esperas en el resto de centros suelen ser mucho más largas”. Llevan más de un año, afirman, pidiendo una solución: “Hemos ido al Justicia de Aragón (defensor de pueblo), enviado a cartas al jefe de Servicio, al director del hospital, pero nada”.
Explican que hace dos años la media de urgencias en el Provincial era de unas 40 diarias, ahora están en 60 o 70, y estos días se han disparado. “En cualquier hospital hay un médico de guardia exclusivamente para los pacientes vitales (los más graves), aquí hay uno para todo tipo de enfermos”.
Porcentaje de ingresos “inusualmente elevado”
El Hospital Nuestra Señora de Gracia no es el único saturado de Zaragoza. Desde el Gobierno de Aragón aseguran que se están registrando un porcentaje de ingresos de Urgencias “inusualmente elevado”. En concreto, explican, ha habido un incremento del 20 %, por encima del habitual 12 % que tenían de referencia de otros años.
Se ha trabajado con previsión, apuntan, y se han tomado “numerosas medidas para asumir la demanda”. Por ejemplo, se están suspendiendo intervenciones quirúrgicas programadas para poder absorber los ingresos. En el Hospital Miguel Servet, que supera el 100 % de su capacidad, se postergaron este martes 13 operaciones, la media de pacientes que permanecen en los pasillos al estar completas las salas de observación es de 20 y las esperas rondan las 12 horas.
También está colapsado el Royo Villanova, en el que, como indican desde la Federación de Sanidad de CCOO Aragón, “no hay camas ni en planta, ni en boxes, ni en pasillo para poder atender a más pacientes”.
“No falta personal”
Según la información del Ejecutivo autónomo, en el Miguel Servet se ha reforzado el personal con 24 enfermeras y 24 auxiliares. El problema, apunta el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, “no es contratar a más gente, sino tener sitio para ubicar a los pacientes”.
Reconoce que las previsiones de su departamento se han visto sobrepasadas, aunque también cree que “a veces hay cierto abuso de las urgencias por parte de los pacientes”. Respecto a las causas, señala, junto a la gripe, a los problemas respiratorios, y envía un mensaje a navegantes: “Llevamos años de recortes en sanidad y pasan factura”.