Asturias recibe por primera vez ayudas directas para paliar los efectos de la sequía
Asturias contará por primera vez con ayudas directas del Gobierno frente a la sequía, destinadas a los sectores de vacuno, ovino y caprino de carne y leche, apícola y agrícola. El consejero de Medio Rural, Alejandro Calvo, ha valorado muy positivamente estas medidas, impulsadas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y ha resaltado que suponen un gran apoyo para las explotaciones familiares agrarias de nuestra comunidad autónoma.
Para los productores de carne y leche de vacuno, ovino y caprino, las ayudas se abonarán directamente a los titulares de las explotaciones beneficiarios de las ayudas asociadas de la Política Agraria Común (PAC) 2022. Para el sector apícola, se realizará una convocatoria específica y las ayudas serán complementarias a las de la Intervención Sectorial Apícola, con máximos en función del tamaño de la explotación.
Calvo ha valorado las medidas impulsadas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para compensar a agricultores y ganaderos por la subida de los costes de producción que han sido anunciadas hoy en la reunión telemática del Consejo Consultivo de Política Agraria para Asuntos Comunitarios.
El paquete de medidas incluye también la flexibilización determinados requisitos de las ayudas directas de la PAC 2023. Así, se amplía el plazo para la presentación de la solicitud única hasta el 30 de junio, se retrasa la entrada en vigor del Cuaderno Digital de Explotación y se pospone a 2025 la incorporación de la información obligatoria.Además, se aplicará la causa de fuerza mayor de oficio por la sequía a requisitos de condicionalidad reforzada, ecorregímenes y ayudas asociadas.
También se mejoran los seguros agrarios, que podrán subvencionar hasta el 70% el coste de las pólizas ya contratadas que incluyan la cobertura por riesgo de sequía en los cultivos de secano de herbáceos extensivos, avellano, kiwi, olivar, uva de vinificación, almendro, endrino, alfalfa, remolacha azucarera y maíz forrajero.
En el ámbito fiscal, se exime del pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a las propiedades de los titulares de explotaciones agrícolas o ganaderas que hayan sufrido en el ejercicio 2023 una reducción del rendimiento neto de las actividades agrarias de, al menos, un 20% en zonas con limitaciones naturales, según la normativa de la Unión Europea, o de un 30% en las demás.
También se eximen del pago de IRPF y del impuesto de sociedades las ayudas que se perciban por los ecorregímenes de la PAC y del impuesto de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados la formalización de avales de la Sociedad Estatal de Caución Agraria (Saeca).
Estas medidas se suman a la convocatoria extraordinaria de ayudas, dotada con cuatro millones, para ganaderías de cebo y/o con vacas nodrizas, para hacer frente a la subida de los costes de producción motivada por la invasión rusa de Ucrania. Las subvenciones, cofinanciadas a través del Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader), se abonaron en abril y ya se han destinado tres millones a las ganaderías que ceban terneros producidos en la propia explotación y un millón a aquellas que mantienen vacas nodrizas
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