A la responsabilidad se llega a través de la reflexión. Para concluir sobre la necesidad del Comercio Justo propongo como punto de partida el plan PIVE. ¿Qué tienen que ver? Mucho, veamos.
Gobiernos de distinto color vienen subvencionando desde 2009 la compra de coches para apuntalar un sector muy debilitado por la crisis (como todos). Este año el PIVE dispone de 175 millones de euros pero, ¿cuánto nos cuesta realmente tener más coches en las calles? y ¿qué objetivo realmente cumple el PIVE?
En 2103, 1.130 personas murieron en la carretera. Según Ecologistas en Acción, otras 20.000 murieron de forma prematura por causa de la contaminación. La DGT se gastará 8.4 millones de euros en la campaña publicitaria para reducir las muertes en carretera. Todavía no hay plan ni presupuesto para frenar las muertes por contaminación.
Ciudades como Barcelona o Madrid están entre las más contaminadas de Europa. Madrid, por ejemplo, tendrá que pagar una multa millonaria (todavía por definir) al Tribunal Europeo por superar los límites legales de contaminación desde 2010 y no hacer nada al respecto. Quizás lo que se necesita sean menos coches en las calles, y no más como se pretende desde el PIVE.
Aun así, podemos, afirmar que el PIVE es un éxito. Todos los presupuestos de planes PIVE se han extinguido antes de la fecha prevista. La gente compra coches y empresas como Renault, Volkswagen, Toyota o Repsol anuncian beneficios millonarios. Cifras de record.
Sin embargo, entre 2007 y 2012 se destruyeron más de 124.000 empleos en el sector automotriz. La industria del automóvil advierte además que en Europa y en España habrá todavía una mayor reducción de salarios y más despidos. Como la gente gana menos o no tiene empleo, pues baja la demanda. A pesar del plan PIVE.
¿Se soluciona algo subvencionando la compra de coches?
El Plan PIVE forma parte de un esquema creado para poner grandes cantidades de dinero público en unas pocas manos privadas de forma legal, legítima y aparentemente necesaria. Y así aumentar las diferencias sociales de forma superlativa. Por aportar un dato, según un informe de I-O, los 20 españoles más ricos tienen la misma fortuna que los 9,5 millones más pobres.
Planes como el PIVE tienen consecuencias. Las más graves las sufren las personas más vulnerables que se ven en una situación de total desamparo: no hay dinero para becas, salud universal o comedores sociales, pero sí hay para comprar un BMW. Quién pude permitirse un BMW ¿realmente necesita una subvención?
Desde hace casi 40 años la misma transferencia (o expolio, si se prefiere) de dinero público se viene dando en países de África, América y Asia. Con consecuencias mucho más graves porque sus habitantes parten de una situación de pobreza extrema y son mucho más vulnerables. Por aportar otro dato: las 85 personas más ricas del mundo tienen tanto como las 3.500 más pobres.
Es hora que nos demos cuenta que el sistema globalizado de las desigualdades, que se inicia hace décadas en otros países, ha llegado a Europa para quedarse. Ante esto, ¿qué puedo hacer yo? En primer lugar dejar de creer que el sistema es así y no se puede cambiar. Sí se puede. Y el cambio empieza por pequeñas decisiones individuales que a la larga cambian el mundo: a partir de hoy compra siempre productos de Comercio Justo.
El Comercio Justo es un sistema comercial solidario y alternativo al convencional. Busca una mayor justicia y dignidad en las relaciones de compra y venta entre productores, comerciantes y consumidores.
Sobre este blog
Ayuda en Acción es una Organización No Gubernamental de Desarrollo independiente, aconfesional y apartidista que trabaja en América, África y Asia con programas de desarrollo integral a largo plazo en diferentes ámbitos para mejorar las condiciones de vida de los niños y niñas, así como el de las familias y comunidades a través de proyectos autosostenibles y actividades de sensibilización.
