Sea cual sea la actividad o deporte que vayamos a realizar en la montaña, se verá ligada a la necesidad de saber orientarse, ya que si no sería imposible llegar al destino. Éste puede ser una pared de escalada, una pista esquí, un sedero que se adentra dentro de un frondoso bosque o el ansiado refugio tras un día duro de actividad. En caso de emergencia es muy importante saber dónde te encuentras para pedir ayuda o saber si puedes refugiarte en algún lugar cercano. Saber orientarse correctamente te ayudará a desplazarte por cualquier lugar del mundo, con un mayor control y conocimiento de lo que haces, así como reconocer desde un mapa un lugar sin estar físicamente en él.
Debido a éstas y otras razones se empezó a entrenar las técnicas de orientación, construir mapas más precisos y de fácil lectura, e incluso se creó un deporte propio e independiente: hoy en día conocido como Carreras de Orientación.
Este deporte, de fácil aprendizaje, emplea distintos medios de desplazamiento (carrera, bicicleta, piragua, etc) en función de los objetivos a conseguir. Para cumplir objetivos se dispone de la ayuda de un mapa, una brújula y un puñado de conocimientos bien practicados.
Para empezar a practicar este deporte lo mejor es contar con alguien que nos pueda enseñar las técnicas y conocimientos necesarios que nos permitan desenvolvernos por el medio natural. Necesitarás un mapa de escala 1:5000 o 1:10.000, ya que el resto no son tan detallados como éstos, y una funda de plástico transparente para poder proteger y doblar el mapa sin que se estropeé. Aprended a doblar el mapa de tal forma que con una mirada puedas ver el lugar dónde te encuentras y la parte del mapa dónde se encuentra la leyenda. Ésta nos dará información muy valiosa del terreno, datos adicionales y la fecha de construcción, ya que puede que sea muy antiguo y encontremos cosas nuevas u otras que ya no están.
Lo primero que tenemos que hacer es leer el mapa y toda su información. Es recomendable aprendernos todos los símbolos que aparecen en la leyenda, ya que nos darán mucha información sobre el terreno que vamos a trabajar: si hay mucho desnivel, si la vegetación es muy extensa, los ríos, las construcciones que ha podido realizar el hombre, vallas que nos impidan el paso, etc. Es muy importante saber la escala con la que estamos trabajando para así hacernos una idea real de lo que estamos viendo en el mapa. ¡Recuerda que el norte está situado en la parte superior del mapa!
Una vez que controlemos el mapa nos situaremos en un lugar en el terreno el cual identificaremos en el mapa. Seguidamente lo orientaremos en función del lugar en el que nos encontramos, siendo lo más cómodo fijarnos en los elementos lineales: un camino, un río, una valla, un tendido de luz, etc. Daremos un paseo reconociendo el terreno y sabiendo dónde estamos en todo momento. Moveos por senderos.
Durante este paseo lo mejor es fijarse en los elemento naturales, ya que los construidos por el hombre en ocasiones pueden aparecer y desaparecer a su antojo, teniendo en cuenta las curvas de nivel, que nos darán mucha información del terreno y nos permitirán apreciar las zonas de difícil acceso. También es importante saber la distancia que somos capaces de recorrer en un determinado tiempo y a distintos ritmos.
Para acercarnos más a esas carreras de orientación lo mejor que podemos hacer es realizar un score sencillo para identificar distintos puntos en el terreno, durante un tiempo determinado, y así poder familiarizarnos con los distintos controles en el futuro.
Para realizar esto, lo mejor es contar con al menos dos personas, las cuales planificarán un problema que tendrá que resolver el compañero y viceversa. Tendremos que dibujar un punto de salida con un triángulo y varios controles con un círculo, donde haya elementos significativos del terreno. Éstos los numeraremos e identificaremos en una cartulina, describiendo lo que hay y donde se encuentra y pondremos una baliza o similar, que se identifique de manera fácil. Ej.: cartulina o madera roja y blanca como las balizas y un número que la identifique.
Practica en parques o zonas fáciles que ya conozcas para familiarizarte al máximo con el terreno respecto al mapa y viceversa. Posteriormente prueba en zonas que desconozcas y aumenta el ritmo para ir viendo la capacidad de desplazamiento y percepción en el terreno.
Cosas a tener en cuenta
- Siempre que vayas de un control a otro planifícate el recorrido utilizando elementos lineales de fácil progresión.
- Mide el número de pasos que realizas en una misma distancia por distintos terrenos y desniveles, ya que te ayudará a desplazarte por zonas no lineales para encontrar los puntos de control. Talonamiento.
- Cuando te dirijas a un punto de control delimita por detrás por si te pasas. No te vayas demasiado lejos “stop”. En caso de no saber dónde estás regresa al último punto conocido y vuelve a empezar.
- Cuando corras con una orientación somera pon el dedo sobre el mapa indicando dónde estás para localizarte rápidamente. En zonas complicadas haz una orientación precisa.
Las carreras de orientación son una manera divertida de aprender a orientarse y coger soltura. Estas pruebas te pueden servir para mejorar en otras actividades de montaña, planificarte mejor, etc., siempre teniendo en cuenta que los mapas Topográficos Nacionales tienen otra escala y ofrecen un menor detalle del terreno. Mayor leyenda de datos y la posibilidad de poder dar nuestra posición en coordenadas.
Sea cual sea la razón por la que necesites aprender orientación, te recomendamos que te formes primero. Es muy importante que te enseñe alguien que sepa de verdad y si te interesa la competición acude a la “Federación Española de Orientación (www.fedo.org).
Material necesario del deportista
- Una vestimenta acorde con la época del año. Siempre es recomendable utilizar prendas que cubran todo el cuerpo.
- Calzado resistente.
- Mapa de la zona (si vamos a competir en alguna carrera nos lo proporcionarán)
- Brújula.
- Silbato.
- Funda transparente para proteger el mapa.
- Rotulador rojo.
- Cinta adhesiva.
- Imperdibles para sujetar la tarjeta de control y el dorsal.
Material que hay en una carrera de orientación
- Balizas, que se sitúan en los puntos de control, identificadas de color blanco y rojo. Una baliza es un prisma triangular de aproximadamente 30 cm de lado, realizada en tela con un armazón metálico. Las hay de suelo y para colgar.
- Pinzas marcadoras, que se encuentran en las distintas balizas, para marcar la tarjeta de control, dejando un dibujo de marcaje diferente de las demás. Éstas pueden ser también electrónicas.
- Tarjeta de control. El formato puede variar, pero las características siempre son iguales, con casillas numeradas para picar con las pinzas marcadoras, espacio para los datos del corredor y dorsal, hora de salida y llegada, etc. También cuentan con una casilla “R” para cuando nos confundimos al marcar poder marcar en ella.
Reglas de participación
- La orientación de competición se practica en silencio; los corredores no pueden intercambiar información de ningún tipo durante la prueba.
- Está prohibido realizar parte o el total de un recorrido en colaboración con uno o más corredores.
- Está prohibido seguir a otro corredor para aprovecharse de su mejor nivel técnico.
- El recorrido se debe hacer en el orden oficial de los controles.
- Es obligatorio atender a un corredor que haya sufrido un accidente.
- Cada participante debe respetar a terceros, así como las propiedades privadas, cultivos y zonas de repoblación
- Los competidores de la categoría de No Iniciados deben ceder paso a los corredores de las demás categorías.
- El corredor que no finalice la competición debe comunicarlo en el control de llegada.
- No se debe dejar basuras en el lugar de reunión.
- La organización tiene derecho a verificar la tarjeta de control en cualquier momento.
- Cada participante acepta el reglamento de las Carreras de Orientación y participa, exclusivamente, bajo su
- La baliza y el dispositivo de marcado deben estar siempre colocados en el centro del elemento descrito. Si no se indicase la ubicación, significará “en el centro del elemento característico”.
- Las denominaciones de los elementos característicos son las mismas que para los signos convencionales de los mapas, con excepción de:
- Terraplén, saliente, arista, hondonada, collado.
- Terreno firme, bosquecillo, rincón del bosque.
- Terreno descubierto (claro).
- Construcción (Casa, cabaña,...).
- La altura de los elementos característicos, tales como rocas, escarpaduras, pozos (por encima del suelo), deben indicarse en metros con una cifra decimal. Si la descripción abarca dos elementos, deberá indicarse la altura de ambos. Si la altura de los elementos no es la misma en todos sus lados, hay que indicar la mayor y la menor altura.
- Las dimensiones de elementos horizontales deben indicarse en metros y sin cifras decimales, si su representación no está a escala.
- Los puntos cardinales pueden escribirse con todas las letras. Las abreviaturas se escribirán con mayúsculas y con los signos internacionales: N-S-E-W.
Reglas de la Federación andaluza de Orientación Web-fado.com