El entrenador de la UD Las Palmas, Quique Setién ha valorado al término del encuentro que “lo lógico hubiese sido un empate después de hacer un gran partido”.
Sobre la polémica arbitral, ha encontrado similitudes con lo que ocurrió “en Sevilla”. Para el preparador cántabro “en el penalti hay un pequeño contacto y el rival se tira y la falta del segundo gol sobre Montoro es clamorosa. Ha pitado faltas menores y esa, que es mucho más y delante de él, ni la ha visto”“.
“Es el árbitro el que ha hecho la diferencia. Nos pasó en Sevilla, donde ya perdimos por un penalti, y ahora se repite. La duda es si el árbitro hubiera tenido huevos a pitarlo al revés”.
“Es una pena, pero es así, es algo que no tiene remedio. Debes callar y aguantar, aunque a veces es complicado. No es fácil decidir, pero tienen una influencia en señalar las faltas, en función del equipo que está delante. Eso es así, y no se puede cambiar”, agregó.
“Intentamos sobreponernos a estas adversidades. Quizá al árbitro le pudo la tensión en el campo de un equipo grande”, ha declarado.
Setién ha confesado que en el vestuario los jugadores “estaban muy afectados por el cabreo y la impotencia que supone perder de esta manera, ya que son factores que no puedes controlar y no nos merecemos”.
“Podemos buscar alguna justificación a la derrota, quizá en algunos momentos nos hemos replegado demasiado, pero hay que tener en cuenta que el Villarreal es un rival enorme y han hecho un gran esfuerzo. El equipo ha dado la cara en todo momento y hemos dejado muy buenas sensaciones”, ha comentado.
Preguntado por la racha de cinco partidos sin ganar, respondió: “Ni me preocupa ni me deja de preocupar que el equipo no gane. Ya llevábamos cuatro empates y este partido lo pudimos ganar”.
“Creo que el equipo mantiene una línea de rendimiento estable, pero a veces hay cosas que marcan el resultado. Los resultados ahora no nos acompañan, pero yo me voy más satisfecho por sensaciones perdiendo que la victoria del año pasado, en la que nos pasamos defendiendo en el área propia”, recordó.