La Unión Deportiva Las Palmas continuó este fin de semana con su caída libre en la tabla clasificatoria de la Liga BBVA tras ser superada por el Salamanca (1-2) en el Estadio de Gran Canaria, pese a mostrar una mejoría notoria en su juego y volver a contar con el apoyo de una afición que transformó sus abucheos anteriores en aplausos.
El equipo amarillo constató que después de la llegada del técnico Juan Manuel Rodríguez han ido a más muchas de sus prestaciones, aunque aún todavía ese progreso no le alcanza para sumar de tres en tres.
“Estoy muy contento del rendimiento de mis jugadores. Esta es la mejor manera de salir adelante y conseguir cosas”, declaró Rodríguez a la conclusión del encuentro, evidenciando que aminoraba la decepción de esta derrota el buen tono colectivo de sus hombres.
Adversidades añadidas como las retiradas por lesión de Fukuda y Darino -el primero dejó al equipo con diez al haberse agotado los tres cambios y podría afrontar una larga convalecencia si se confirma que ha recaído de su rotura muscular- retratan el estado de desgracia en el que ha entrado una Unión Deportiva que sigue batiendo registros históricos por su mal comienzo liguero.
Este miércoles el conjunto isleño deberá afrontar la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey ante el Villarreal en Siete Palmas -21.00 horas)-, un compromiso que llega en mal momento por los males ligueros que marcan su actualidad.
La plantilla del citado conjunto grancanario disfrutó este domingo de jornada de descanso y este lunes comenzará a preparar, con una sesión matutina en Barranco Seco, una eliminatoria copera cuya suerte no se dilucidará hasta el próximo año, toda vez que la vuelta se disputará en El Madrigal el 2 de enero.