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Hierofania solar durante el solsticio de invierno en el Santuario del Risco Chapín

21 de diciembre de 2022 22:48 h

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Hoy es el día más corto y la noche más larga del año. Esto sucede cuando se produce el solsticio de invierno en el hemisferio norte, que es donde estamos. El solsticio de invierno ocurre cuando este hemisferio se inclina más lejos del Sol y recibe menos luz del día, lo que se repite cada 21 o 22 de diciembre. A menudo nos olvidamos de que las celebraciones de Navidad están más relacionadas con antiguos rituales del solsticio de invierno que con cualquier otra cosa. 

Aunque los principales templos astronómicos de los antiguos canarios fueron los de Artevigua y Tara, construidos bajo tierra para fijar con precisión la llegada de los equinoccios y solsticios, lo cierto es que existían también otros lugares y construcciones,  tanto en cuevas como en superficie, que se construyeron y orientaron para determinar esos momentos astronómicos, de salidas y puestas de objetos celestes, como el Sol y La Luna, que servían no solo para comprobar y calibrar las fechas de sus calendarios, sino sobre todo para determinar la celebración de su rituales y ceremonias orientadas a la comunidad. 

En las Montañas Sagradas de Gran Canaria, en el Santuario del Risco Chapín, existe una cueva que estamos estudiando, conocida como Las Machas. La tradición cuenta que allí vivían brujas.

En su interior se encuentra la representación de gran tamaño de un triangulo púbico, asociado a otros de menor tamaño. Este grabado  púbico esta orientado intencionadamente, de tal forma que, en la puesta de sol del solsticio de invierno, los últimos rayos de luz solar penetran en la cueva e iluminan (y fecundan) directamente este grabado que adquiere un color rojizo, que va subiendo de intensidad hasta que poco a poco se va oscureciendo. Esta hierofanía solar, que nos recuerda a la fecundación de la Madre Tierra y que llevamos estudiando desde hace años, viene a demostrar una vez más, como sucede en el templo astronómico de Artevigua, la relación existente entre los grabados y representaciones del triángulo púbico femenino, y los eventos astronómicos, como los solsticios y equinoccios. Una relación establecida por los sacerdotes astrónomos canarios que viene a reforzar la idea del calendario y los rituales de la fertilidad.

Hoy es el día más corto y la noche más larga del año. Esto sucede cuando se produce el solsticio de invierno en el hemisferio norte, que es donde estamos. El solsticio de invierno ocurre cuando este hemisferio se inclina más lejos del Sol y recibe menos luz del día, lo que se repite cada 21 o 22 de diciembre. A menudo nos olvidamos de que las celebraciones de Navidad están más relacionadas con antiguos rituales del solsticio de invierno que con cualquier otra cosa. 

Aunque los principales templos astronómicos de los antiguos canarios fueron los de Artevigua y Tara, construidos bajo tierra para fijar con precisión la llegada de los equinoccios y solsticios, lo cierto es que existían también otros lugares y construcciones,  tanto en cuevas como en superficie, que se construyeron y orientaron para determinar esos momentos astronómicos, de salidas y puestas de objetos celestes, como el Sol y La Luna, que servían no solo para comprobar y calibrar las fechas de sus calendarios, sino sobre todo para determinar la celebración de su rituales y ceremonias orientadas a la comunidad.