El Catecismo, contra Losantos

Con la propia medicina de la Santa Madre Iglesia se puede acabar con patologías como la que representa para el periodismo Federico Jiménez Losantos. Y aplicamos lo de patología asiéndonos con nuestra proverbial mala uva a la misma terminología que emplea el psiquiatra favorito del PP, Aquilino Polaino, para la homosexualidad. Circula por la Red una iniciativa ciudadana que pretende que la Conferencia Episcopal aparte a Federico Jiménez Losandos del programa que presenta en la Cope. Para ello, los firmantes (que ya iban este domingo por más de 3.000) se agarran al mismísimo Catecismo, que entre otras lindezas, dice que los responsables de los medios de comunicación ?tienen la obligación, en su difusión de la información, de servir a la verdad y de no ofender a la caridad. Han de esforzarse por respetar con una delicadeza igual, la naturaleza de los hechos y los límites y el juicio crítico respecto a las personas. Deben evitar ceder a la difamación?. Les recomendamos que se lean el manifiesto, y si lo quieren firmar, pues también.

Con la propia medicina de la Santa Madre Iglesia se puede acabar con patologías como la que representa para el periodismo Federico Jiménez Losantos. Y aplicamos lo de patología asiéndonos con nuestra proverbial mala uva a la misma terminología que emplea el psiquiatra favorito del PP, Aquilino Polaino, para la homosexualidad. Circula por la Red una iniciativa ciudadana que pretende que la Conferencia Episcopal aparte a Federico Jiménez Losandos del programa que presenta en la Cope. Para ello, los firmantes (que ya iban este domingo por más de 3.000) se agarran al mismísimo Catecismo, que entre otras lindezas, dice que los responsables de los medios de comunicación ?tienen la obligación, en su difusión de la información, de servir a la verdad y de no ofender a la caridad. Han de esforzarse por respetar con una delicadeza igual, la naturaleza de los hechos y los límites y el juicio crítico respecto a las personas. Deben evitar ceder a la difamación?. Les recomendamos que se lean el manifiesto, y si lo quieren firmar, pues también.