El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Conmoción en la alta sociedad grancanaria
Anda verdaderamente conmovida la alta sociedad grancanaria tras la repentina desaparición de uno de sus personajes más singulares, Giovanni Carenzio. Mecenas del teatro Pérez Galdós hasta hace muy pocas semanas, animador de grandes encuentros sociales, aglutinador de amistades, intereses y proyectos, la desaparición de Carenzio es lo más comentado en los ambientes empresariales y sociales de más alta alcurnia de la ciudad. Italiano de nacionalidad, broker de profesión, conectado con los altos cargos más relevantes del Partido Popular Europeo y, por ende, del PP español y canario, se da por hecho que su desaparición ha sido de carácter voluntario. De hecho en su casa, una emblemática residencia de la calle del Espíritu Santo, informan de que está de viaje “desde hace quince días”, sin que puedan concretar cuándo tiene previsto su regreso. No consta ninguna denuncia familiar por su desaparición, aunque parece haberse tramitado otra por reclamación de cantidades por parte de un particular relacionado con una conocida familia con rango nobiliario. La última noticia oficial que hemos podido recabar fue su decisión de comunicar a la Fundación Pérez Galdós que dejaba de ser mecenas, condición que mantenía desde los orígenes de esa entidad.
Anda verdaderamente conmovida la alta sociedad grancanaria tras la repentina desaparición de uno de sus personajes más singulares, Giovanni Carenzio. Mecenas del teatro Pérez Galdós hasta hace muy pocas semanas, animador de grandes encuentros sociales, aglutinador de amistades, intereses y proyectos, la desaparición de Carenzio es lo más comentado en los ambientes empresariales y sociales de más alta alcurnia de la ciudad. Italiano de nacionalidad, broker de profesión, conectado con los altos cargos más relevantes del Partido Popular Europeo y, por ende, del PP español y canario, se da por hecho que su desaparición ha sido de carácter voluntario. De hecho en su casa, una emblemática residencia de la calle del Espíritu Santo, informan de que está de viaje “desde hace quince días”, sin que puedan concretar cuándo tiene previsto su regreso. No consta ninguna denuncia familiar por su desaparición, aunque parece haberse tramitado otra por reclamación de cantidades por parte de un particular relacionado con una conocida familia con rango nobiliario. La última noticia oficial que hemos podido recabar fue su decisión de comunicar a la Fundación Pérez Galdós que dejaba de ser mecenas, condición que mantenía desde los orígenes de esa entidad.