Canarias Ahora Opinión y blogs

Sobre este blog

La portada de mañana
Acceder
La guerra entre PSOE y PP bloquea el acuerdo entre el Gobierno y las comunidades
Un año en derrocar a Al Asad: el líder del asalto militar sirio detalla la operación
Opinión - Un tercio de los españoles no entienden lo que leen. Por Rosa María Artal

Dijo conocer al secuestrador de Maddie McCann

El currículo profesional y artístico de Antonio Toscano lo sitúan al mismo tiempo ejerciendo de actor en Estados Unidos y de cámara de Antena 3 Televisión, lo que nos lleva a sospechar que tiene muy amplificadas algunas dotes absorbidas del más allá, lo que explicaría sus capacidades para ver más acá. El periódico El Mundo -experto en periodismo creativo- le creyó cuando afirmó que conocía al secuestrador de la niña británica Madelaine McCann, que tenía datos acerca de su pasado y de cómo había sido el secuestro. La familia de la menor desaparecida agradeció los datos que públicamente ofrecía Toscano, pero le pidieron que en vez de contactar con ellos, como pedía el aguerrido investigador, contara todo lo que sabía a la Policía Judicial portuguesa, que era la que en aquellos momentos llevaba el caso. Toscano no lo hizo, quizás porque le daba cierto apuro tomar el pelo a tanta gente e incluir entre sus víctimas a un cuerpo policial. La niña sigue sin aparecer como siguen sin aclararse todos los casos en los que mete las narices este investigador tan experto.

El currículo profesional y artístico de Antonio Toscano lo sitúan al mismo tiempo ejerciendo de actor en Estados Unidos y de cámara de Antena 3 Televisión, lo que nos lleva a sospechar que tiene muy amplificadas algunas dotes absorbidas del más allá, lo que explicaría sus capacidades para ver más acá. El periódico El Mundo -experto en periodismo creativo- le creyó cuando afirmó que conocía al secuestrador de la niña británica Madelaine McCann, que tenía datos acerca de su pasado y de cómo había sido el secuestro. La familia de la menor desaparecida agradeció los datos que públicamente ofrecía Toscano, pero le pidieron que en vez de contactar con ellos, como pedía el aguerrido investigador, contara todo lo que sabía a la Policía Judicial portuguesa, que era la que en aquellos momentos llevaba el caso. Toscano no lo hizo, quizás porque le daba cierto apuro tomar el pelo a tanta gente e incluir entre sus víctimas a un cuerpo policial. La niña sigue sin aparecer como siguen sin aclararse todos los casos en los que mete las narices este investigador tan experto.