El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Energúmenos en el Castillo del Romeral
La noticia de las detenciones de la Operación Paraiso corrió como un reguero de pólvora por toda la isla, pero especialmente en San Bartolomé de Tirajana. Los reporteros gráficos se personaron de inmediato en el domicilio de Pauco Guedes cumpliendo con su trabajo, el que los lectores y telespectadores reclaman cada día de los medios informativos. Pero como toda república bananera que se precie, también en Castillo del Romeral hay energúmenos, personajes de submundo de esos que todavía creen que matando al mensajero se acaban todos sus problemas. Y lo que han hecho es dejar en mal lugar a un barrio que no tiene culpa de que tener entre sus vecinos a unos cuantos fanáticos que seguramente deberán a Pacuco Guedes cosas tan inconfesables que consideran que lo mejor es taparlas con gritos, con mordidas de perro y con agresiones a los periodistas. Está claro que la corrupción gusta a algunos.
La noticia de las detenciones de la Operación Paraiso corrió como un reguero de pólvora por toda la isla, pero especialmente en San Bartolomé de Tirajana. Los reporteros gráficos se personaron de inmediato en el domicilio de Pauco Guedes cumpliendo con su trabajo, el que los lectores y telespectadores reclaman cada día de los medios informativos. Pero como toda república bananera que se precie, también en Castillo del Romeral hay energúmenos, personajes de submundo de esos que todavía creen que matando al mensajero se acaban todos sus problemas. Y lo que han hecho es dejar en mal lugar a un barrio que no tiene culpa de que tener entre sus vecinos a unos cuantos fanáticos que seguramente deberán a Pacuco Guedes cosas tan inconfesables que consideran que lo mejor es taparlas con gritos, con mordidas de perro y con agresiones a los periodistas. Está claro que la corrupción gusta a algunos.