Granadilla ya censura libros

Seguimos a la espera de conocer qué postura adoptará el Grupo Socialista en el Parlamento de Canarias ante la iniciativa legislativa popular para declarar espacio natural protegido el litoral del municipio de Granadilla, seguramente porque Juan Carlos Alemán no sabe a quién agradar: si a José Segura y al alcalde de ese municipio, José González Cejas, y con ellos al movimiento empresarial que quiere la obra ya, o a la Agrupación de Santa Cruz, a un nutrido grupo de militantes y a los ciudadanos con los que ha sintonizado el que fuera director general de Marina Mercante, Pedro Anatael Meneses, que propugnan un desarrollo del Puerto de la capital tinerfeña. Para que vean que en casi todas partes cuecen habas, ahí tienen al alcalde de Granadilla secuestrando un libro infantil por considerarlo un alegato excesivo en defensa del medio ambiente. El Ayuntamiento compró 500 ejemplares de El corazón de la Montaña Roja, de Isabel Medina, para las escuelas y bibliotecas del municipio y luego no lo distribuyó. Parece que no le gustó el desenlace desfavorable al malvado Poderoso Caballero del Maletín (¿les suena?) y el Sombrero. La razón esgrimida ante la autora ha sido que la historia que cuenta puede manipular a los niños. Ah, será peor que lo otro.

Seguimos a la espera de conocer qué postura adoptará el Grupo Socialista en el Parlamento de Canarias ante la iniciativa legislativa popular para declarar espacio natural protegido el litoral del municipio de Granadilla, seguramente porque Juan Carlos Alemán no sabe a quién agradar: si a José Segura y al alcalde de ese municipio, José González Cejas, y con ellos al movimiento empresarial que quiere la obra ya, o a la Agrupación de Santa Cruz, a un nutrido grupo de militantes y a los ciudadanos con los que ha sintonizado el que fuera director general de Marina Mercante, Pedro Anatael Meneses, que propugnan un desarrollo del Puerto de la capital tinerfeña. Para que vean que en casi todas partes cuecen habas, ahí tienen al alcalde de Granadilla secuestrando un libro infantil por considerarlo un alegato excesivo en defensa del medio ambiente. El Ayuntamiento compró 500 ejemplares de El corazón de la Montaña Roja, de Isabel Medina, para las escuelas y bibliotecas del municipio y luego no lo distribuyó. Parece que no le gustó el desenlace desfavorable al malvado Poderoso Caballero del Maletín (¿les suena?) y el Sombrero. La razón esgrimida ante la autora ha sido que la historia que cuenta puede manipular a los niños. Ah, será peor que lo otro.