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Opinión - La fiesta acaba de empezar. Por Esther Palomera

Julio Suárez reconcilia a Soria

Si no fuera porque nos cuesta trabajo reconocerle capacidad para lo maquiavélico, casi diríamos que Julio Suárez, el secretario técnico del Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, ha fichado por el equipo de campaña de José Manuel Soria para las elecciones de 2007. Andaba caliente el hombre por el fervor con que el presidente del Cabildo celebró este domingo los goles de la UD: “Bah, se celebran los goles en el palco y eso hay que respetarlo...”. “¿Pero quién, quién fue?”, le preguntaba Gregorio Guerra en Canal 9. “Soria, Soria, Soria... bah veremos en las elecciones a ver qué pasa...”, responde Suárez. “Dicen que éramos del PP y no tenemos nada”, remata. Antológico. ¡Qué tiempos aquellos en que el dirigente político era alma, corazón y vida de los colegiales, y qué tiempos en los que afirmaba en privado que el representativo grancanario sería el primero que llegara a Primera! Ahora toca reconciliarse con la afición más numerosa, y en eso Julio Suárez ha echado una manita.

Si no fuera porque nos cuesta trabajo reconocerle capacidad para lo maquiavélico, casi diríamos que Julio Suárez, el secretario técnico del Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, ha fichado por el equipo de campaña de José Manuel Soria para las elecciones de 2007. Andaba caliente el hombre por el fervor con que el presidente del Cabildo celebró este domingo los goles de la UD: “Bah, se celebran los goles en el palco y eso hay que respetarlo...”. “¿Pero quién, quién fue?”, le preguntaba Gregorio Guerra en Canal 9. “Soria, Soria, Soria... bah veremos en las elecciones a ver qué pasa...”, responde Suárez. “Dicen que éramos del PP y no tenemos nada”, remata. Antológico. ¡Qué tiempos aquellos en que el dirigente político era alma, corazón y vida de los colegiales, y qué tiempos en los que afirmaba en privado que el representativo grancanario sería el primero que llegara a Primera! Ahora toca reconciliarse con la afición más numerosa, y en eso Julio Suárez ha echado una manita.