Memorial Andrés Chaves

Ya que andamos metidos en la Red y en el arte de algunos para retratar lo que ocurre en audio o en vídeo, les ofrecemos este lunes tan agosteño una pequeña muestra de lo que nos hemos encontrado en Internet de ese singular personaje del periodismo (por llamarlo de algún modo) tinerfeño de nombre Andrés Chaves. Debe ser que hay un experto que lo clava, oye, que lo escucha con pasión para extraer de él estos cortes de sonido que son una auténtica delicia, un retrato de un vividor de la profesión sobre la que él mismo se cisca cada día, ora poniendo la mano como ninguno, ora con intromisiones inadmisibles en la vida privada de los que le sacan los colores sin temor a su aerofagia verbal. Después de muchas idas y venidas con el resultado constante de todos conocido, Chaves ha recalado en el periódico El Día, donde escribe al dictado del que le paga después de haberlo puesto de chupa de dómine de manera inmisericorde. Pero también conserva una emisora, Radio Ranilla, a través de la cuál expele sus filias y sus fobias al peso, esto es, en razón del dinero que el interesado o interesada les suelta. Vean algunas pruebas seleccionadas por ese maestro que hemos encontrado en la Red.

Ya que andamos metidos en la Red y en el arte de algunos para retratar lo que ocurre en audio o en vídeo, les ofrecemos este lunes tan agosteño una pequeña muestra de lo que nos hemos encontrado en Internet de ese singular personaje del periodismo (por llamarlo de algún modo) tinerfeño de nombre Andrés Chaves. Debe ser que hay un experto que lo clava, oye, que lo escucha con pasión para extraer de él estos cortes de sonido que son una auténtica delicia, un retrato de un vividor de la profesión sobre la que él mismo se cisca cada día, ora poniendo la mano como ninguno, ora con intromisiones inadmisibles en la vida privada de los que le sacan los colores sin temor a su aerofagia verbal. Después de muchas idas y venidas con el resultado constante de todos conocido, Chaves ha recalado en el periódico El Día, donde escribe al dictado del que le paga después de haberlo puesto de chupa de dómine de manera inmisericorde. Pero también conserva una emisora, Radio Ranilla, a través de la cuál expele sus filias y sus fobias al peso, esto es, en razón del dinero que el interesado o interesada les suelta. Vean algunas pruebas seleccionadas por ese maestro que hemos encontrado en la Red.