El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Precursor del periodismo creativo
Desde las páginas de Canarias7, Víctor Rodríguez Gago formó rápidamente equipo con otro fiera del asesinato por encargo, José Suárez Mugica, Pepillo. Juntos se encargaron de poner en marcha lo que desde aquí bautizamos desde entonces como “periodismo creativo”. A ninguno de los dos (y mucho menos a su jefe, Juan Francisco García) les importó lo más mínimo poner en peligro una empresa de economía social como Global, que nacía entonces producto de la fusión de Salcai y Utinsa, ni la suerte de sus más de 800 socios-trabajadores. Había que desacreditar a Sánchez Bolaños y cualquier cosa valía, incluida la mentira más descarada. Juntos, además, se convirtieron en los voceros mediáticos de José Miguel Suárez Gil, al que consiguieron aupar a la presidencia de la Cámara de Comercio de Las Palmas con los métodos de todos conocidos.
Desde las páginas de Canarias7, Víctor Rodríguez Gago formó rápidamente equipo con otro fiera del asesinato por encargo, José Suárez Mugica, Pepillo. Juntos se encargaron de poner en marcha lo que desde aquí bautizamos desde entonces como “periodismo creativo”. A ninguno de los dos (y mucho menos a su jefe, Juan Francisco García) les importó lo más mínimo poner en peligro una empresa de economía social como Global, que nacía entonces producto de la fusión de Salcai y Utinsa, ni la suerte de sus más de 800 socios-trabajadores. Había que desacreditar a Sánchez Bolaños y cualquier cosa valía, incluida la mentira más descarada. Juntos, además, se convirtieron en los voceros mediáticos de José Miguel Suárez Gil, al que consiguieron aupar a la presidencia de la Cámara de Comercio de Las Palmas con los métodos de todos conocidos.