El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Revista de prensa con derechona de fondo
Hay que ver cómo empeora, dentro de la gravedad, la prensa de la derechona española, que no esquiva ninguna situación y mucho menos un atentado para arremeter contra los malditos socialistas. Quizás haya sido el periódico de Intereconomía, La Gaceta, quien se llevó este domingo la palma con su portada, en la que incluyó una foto del presunto asesino de Noruega ataviado con el mandil y demás hábitos masónicos para arremeter contra la izquierda y “la prensa progre”, a la que acusó de haber ocultado esa antigua pertenencia de Anders Behring Breivik a la masonería por no sabemos muy bien qué bastardos motivos. A la derechona ha puesto muy nerviosa esta terrible masacre Noruega, quizás por su miedo a que cualquier cosa que se salga de la normalidad y que no tenga que ver con la prima única pueda entorpecer el paseo triunfal de Rajoy a La Moncloa. No llevan muy bien que se llame a ese presunto asesino “fundamentalista cristiano”, y menos ultraderechista, porque a) el Papa Ratzinger está a punto de bendecirnos con su visita y b) la ultraderecha española aguarda agazapada dentro del PP el regreso de las banderas victoriosas al paso alegre de la paz...
Hay que ver cómo empeora, dentro de la gravedad, la prensa de la derechona española, que no esquiva ninguna situación y mucho menos un atentado para arremeter contra los malditos socialistas. Quizás haya sido el periódico de Intereconomía, La Gaceta, quien se llevó este domingo la palma con su portada, en la que incluyó una foto del presunto asesino de Noruega ataviado con el mandil y demás hábitos masónicos para arremeter contra la izquierda y “la prensa progre”, a la que acusó de haber ocultado esa antigua pertenencia de Anders Behring Breivik a la masonería por no sabemos muy bien qué bastardos motivos. A la derechona ha puesto muy nerviosa esta terrible masacre Noruega, quizás por su miedo a que cualquier cosa que se salga de la normalidad y que no tenga que ver con la prima única pueda entorpecer el paseo triunfal de Rajoy a La Moncloa. No llevan muy bien que se llame a ese presunto asesino “fundamentalista cristiano”, y menos ultraderechista, porque a) el Papa Ratzinger está a punto de bendecirnos con su visita y b) la ultraderecha española aguarda agazapada dentro del PP el regreso de las banderas victoriosas al paso alegre de la paz...