Roy tiene su olivar

Un grupo de amigos y compañeros de Carlos G. Roy, periodista y hombre libre, fallecido en enero pasado, participaron este sábado en la plantación de un olivar en su memoria en Tejeda. Roy había estado allí, concretamente en el albergue del municipio, unos días antes de abandonarnos. Y aquello le chifló. Y hasta mejoró un poco de su enfermedad implacable. Periodistas, de este y de otros medios; políticos de todos los partidos, empresarios, profesionales, familiares, amigos, tertulianos... se dieron cita en aquel impresionante paisaje para recordarlo con mucho respeto y con mucho cariño, tomar unos vinos y un potaje de jaramagos, y confabularse para continuar en el tajo. En la línea que él abrazó con tanta pasión cuando se sumó a este proyecto que nos disponemos a continuar con fuerzas renovadas.

Un grupo de amigos y compañeros de Carlos G. Roy, periodista y hombre libre, fallecido en enero pasado, participaron este sábado en la plantación de un olivar en su memoria en Tejeda. Roy había estado allí, concretamente en el albergue del municipio, unos días antes de abandonarnos. Y aquello le chifló. Y hasta mejoró un poco de su enfermedad implacable. Periodistas, de este y de otros medios; políticos de todos los partidos, empresarios, profesionales, familiares, amigos, tertulianos... se dieron cita en aquel impresionante paisaje para recordarlo con mucho respeto y con mucho cariño, tomar unos vinos y un potaje de jaramagos, y confabularse para continuar en el tajo. En la línea que él abrazó con tanta pasión cuando se sumó a este proyecto que nos disponemos a continuar con fuerzas renovadas.