'La Biblioteca Errante' desvela la figura de Juan Negrín desde su pasión por la literatura

“Los libros suponen un modo de conocer a mi abuelo y de compartir con él los temas de su época”. Así define Carmen Negrín, nieta del último presidente del Gobierno de la República Española, la importancia de La Biblioteca Errante, Juan Negrín y los libros, una exposición compuesta por algunos de los ejemplares que Juan Negrín guardaba en su casa y que se han conservado con el paso de los años. En esta ocasión, son unos cien libros de escritores contemporáneos al médico canario los que se presentan al público, seleccionados con la intención de reflejar su espíritu curioso y su afán por “averiguarlo todo”. Sin embargo, en su archivo se conservan muchos más, casi 10.000 junto a revistas, ensayos, recortes de prensa...

Ciencias, política, ensayos, novelas... todos los temas y géneros tienen cabida en su colección, inédita en España, pero que ya fue mostrada en París. Carmen Negrín, que también es presidenta de honor de la Fundación que hace homenaje a su abuelo, alude a la similitud de temas que preocupaban a principios y mediados del siglo XX y que siguen primando hoy día. Por ello, ha querido acompañar esta presentación de una colección de fotografías que conservaba el científico canario y que lleva por título Refugiados.

Para Carmen Negrín, las imágenes que vemos actualmente de personas llamando a las puertas de Europa, huyendo de situaciones de guerra son similares a las de la Segunda Guerra Mundial. La presidenta de honor de la Fundación señala que a mediados de siglo pasado se internaban a personas en los campos de concentración pero actualmente quienes llegan emigrados ingresan en centros de internamiento. Por ello, la estampa le resulta muy parecida, puntualiza.

Una vida marcada por el exilio

La vida de Juan Negrín estuvo marcada por la multitud de viajes y lugares en los que vivió. De ahí que la colección se denomine La Biblioteca Errante, puesto que la conforman un cúmulo de ejemplares que fue adquiriendo en cada uno de los países por los que ha pasado.

Y es que, en palabras del profesor de la Universidad de Valencia Salvador Albiñana, uno de los comisarios que ha trabajado para recopilar y seleccionar esta muestra, “Negrín fue un gran bibliógrafo”, como reflejó en algunas de sus cartas. Su colección fue inicialmente científico- médica y depositó dichos ejemplares en la biblioteca de la Residencia de Estudiantes de Madrid, que era muy consultada por los intelectuales de la época.

Más tarde, en Alemania, el médico canario se empieza a interesar por otros temas y empieza a ampliar cada vez más su colección. Sus libros viajan a Toulouse, después a París y a Londres, donde tras su muerte en 1956, sus herederos subastan una parte importante su antología. “Se vendieron sin decir que eran de Juan Negrín, sino que pertenecían a un coleccionista español”.

El profesor insiste en que entre la colección se entremezclan géneros, se confunden las artes, las ciencias, el ensayo, la literatura... se confunden todos los géneros como se confundía su propia vida. Además, señala que si, a pesar de la subasta de 1958 se conservan tantos ejemplares es gracias a la labor de la mujer con la que el científico canario pasó los últimos años de su vida, Feliciana López de Dom Pablo y luego gracias a la labor de Carmen Negrín.

Para el secretario general del PSOE en Canarias y catedrático de Historia en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, José Miguel Pérez, esta biblioteca es un “ejemplo maravilloso” de las personas que se tienen que ir al exilio dejando atrás muchas cosas. Al igual que Carmen Negrín considera que “es un símil de las personas que están tocando en las puertas de Europa”.

Un auténtico “adicto” al conocimiento

Para elaborar esta exposición el profesor Albiñana ha colaborado con el director del Instituto Cervantes de París, Juan Manuel Bonet. La nieta de Negrín subraya que trató de no influirles en su trabajo porque asegura tiene una visión subjetiva y se hubiera dejado llevar por el valor sentimental. Sin embargo, insiste en que el objetivo de esta muestra es acercar al público a la gran variedad de temas que interesaban a su abuelo e incidir en que todo se puede traspapelar a la realidad.

La presidenta de honor de la Fundación también relata que a través de las lecturas de su abuelo ha aprendido valores y palabras que considera tan importantes como democracia, libertad o lucha.

Entre tantos ejemplares, Albiñana destaca como la joya de la corona, el poema de Pablo Neruda sobre la Guerra Civil española, la España en el Corazón, del que se conservan muy pocos ejemplares en el mundo. Se estima que 500 libros fueron imprimidos pero tan sólo se conoce de la existencia de cinco o seis.

El que fuera presidente del Gobierno de la República también se interesó de forma profunda por los primeros tratados que darían origen a la Unión Europea, un tema en el que se implicó y fue muy activo. En la colección se refleja una de las intervenciones de Negrín en una convención de la ONU.

Por todo ello, el secretario general del PSOE en Canarias y catedrático de Historia en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, José Miguel Pérez ha calificado a este científico canario como un auténtico “adicto al conocimiento” que intentó averiguar sobre todo lo que pudo. En esta línea recuerda que en los últimos años se ha recuperado su figura “una de las grandes de Europa de aquellos años”, asegura.

Como prueba de su afición por la literatura cabe destacar la estrecha relación que Negrín mantenía con los artistas contemporáneos de su época. De hecho, en la exposición pueden apreciarse algunas de las dedicatorias que le hacían ciertos escritores en sus obras y como ejemplo, se puede apreciar una de Albert Camus.

Esta nueva exposición en la Fundación Juan Negrín que se puede apreciar desde este lunes es uno de los diferentes proyectos que se ha marcado esta institución para seguir recordando su figura.