MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha asegurado que el Gobierno tiene un planteamiento “ambicioso” en materia de privatizaciones para favorecer la inversión y la creación de empleo, pero no para cuadrar las cuentas.
Así lo ha señalado Montoro en el un almuerzo organizado por PwC y la APD al ser preguntado por una eventual privatización de Renfe y Aena, a lo que ha respondido que la voluntad del Gobierno es desarrollar la política de privatizaciones.
En este sentido, el ministro ha explicado que España cuenta con una de las industrias más desarrolladas y competitivas del mundo, por lo que es “lógico” abrir las infraestructuras a la inversión internacional.
Además, ha resaltado la importancia de contar con un buen marco regulatorio porque “no se pueden cambiar las normas cuando el partido se está jugando”. “La idea de la seguridad jurídica es absolutamente clave, fundamental e intocable”, ha dicho.
En cambio, ha resaltado la necesidad de acabar con la política de subvenciones en España porque los Presupuestos están para impulsar la salida de la crisis no para sustituir políticas que por sí mismas no generan actividad.
NO SE RELAJARÁN LOS OBJETIVOS
Montoro ha explicado que estas medidas no buscan cuadrar las cuentas, aunque ha descartado la posibilidad de relajar los objetivos de déficit asumidos por España y ha recordado que un país tan endeudado lo que tiene que hacer es frenar el saldo negativo de las cuentas públicas.
A su parecer, la política de crecimiento pasa por el equilibrio y el saneamiento de las cuentas porque es necesario crecer sobre una economía “saneada y bien financiada”.
TOCAR IMPUESTOS INDIRECTOS
En materia fiscal, Montoro ha asegurado que en este momento no hay margen para subir los impuestos indirectos, aunque ha señalado que en un futuro “más o menos inmediato” España hará lo que recomienda la UE, que es reducir los impuestos sobre el trabajo y elevar los indirectos.
Estas medidas, según Montoro, hay que tomarlas cuando el escenario económico lo permita, es decir, cuando España salga de la recesión. Además, ha resaltado la importancia de acabar con la cultura de no pagar el IVA porque eso es un delito y será perseguido como tal.
En cualquier caso, el ministro ha adelantado que la recaudación de abril se va a acercando a lo presupuestado en 2012, lo que permite “cierta tranquilidad” y ha asegurado que la intención del Gobierno no es subir los impuestos, sino ensanchar las bases imponibles para recaudar más manteniendo el mapa tributario actual.