MÉXICO DF, 29 (EUROPA PRESS)
El presidente mexicano, Felipe Calderón, hizo este martes un llamamiento a todas las fuerzas políticas, los medios de comunicación y la sociedad general a dar “una respuesta unitaria” para poder “cerrar filas” contra el crimen organizado que en los últimos tres años se ha cobrado la vida de unas 22.000 personas.
Las declaraciones de Calderón surgen un día después de que sicarios asesinaran a tiros a Rodolfo Torre Cantú, candidato opositor a la gobernación del estado de Tamaulipas (norte) para los comicios locales del próximo domingo, y a cuatro miembros de su comitiva, entre ellos, un legislador, en un hecho que ha sido considerado el peor crimen contra un político de los últimos años.
“Ante el desafío del crimen organizado, cerremos filas. Respondamos juntos, demos una respuesta unitaria y eficaz de toda la sociedad, y de todas las fuerzas políticas”, expresó el mandatario en una rueda de prensa en la Residencia Oficial de los Pinos.
Los constantes operativos y los despliegues de más de 40.000 militares en todo el país no han podido frenar la violencia propiciada por los cárteles de la droga, por el contrario, ha aumentando progresivamente, lo que ha sido duramente cuestionado por la sociedad mexicana y por organizaciones de Derechos Humanos que denuncia la muerte de civiles inocentes.
Ante esta situación, Calderón invitó a los ciudadanos a “definir entre todos” una respuesta contra el narcotráfico. “Es momento de que se expresen las inquietudes de todos los sectores, especialmente los actores políticos, a fin de fortalecer la estrategia del Estado mexicano por la seguridad pública”, indicó.
De esta manera, aseveró que su Gobierno “no sólo está dispuesto a actuar, y lo ha demostrado, sino que también está dispuesto a escuchar y a dialogar” para poder hacer “un frente común” acordando “acciones concretas que den una respuesta decidida de todas las fuerzas políticas”.
“Estamos ante un desafío que exige que todos los partidos y fuerzas políticas actuemos de manera unida y por encima de nuestras legítimas diferencias”, insistió Calderón.