TECATE (MÉXICO), 22 (Reuters/EP)
Los cárteles del narcotráfico mexicanos están intensificando sus operaciones en el secuestro de emigrantes ilegales para pedir rescates por ellos u obligarles a pasar paquetes de droga a Estados Unidos, advierten las autoridades mexicanas y estadounidenses.
Los traficantes capturan a ciudadanos mexicanos y centroamericanos y los mantienen retenidos en condiciones infrahumanas hasta que sus familiares pagan el rescate, que puede ser superior a los 12.000 dólares (más de 8.000 euros).
El Ejército mexicano y la Guardia fronteriza estadounidense aseguran que las bandas asesinan, desnudan y entierran en zonas remotas del desierto a aquellos rehenes por los que no reciben rescate. Estos sucesos ocurren a lo largo de toda la frontera con Estados Unidos. El mes pasado, soldados mexicanos irrumpieron en una vivienda a las afueras de la ciudad mexicana de Reynosa para rescatar a más de 120 centroamericanos que estaban siendo retenidos por hombres armados.
“El secuestro de emigrantes está ocurriendo tanto en México como en Estados Unidos y va en aumento”, alertó la cónsul mexicana en San Diego, María de los Remedios Gómez. Por otra parte, el aumento de las medidas de seguridad en la frontera ha provocado que suba el precio que los emigrantes deben pagar para llegar a territorio norteamericano.
El tráfico de personas genera cada año 2.000 millones de dólares (más de 1.300 millones de euros) de beneficios sólo en el estado de Arizona, en base a los datos de las autoridades estadounidenses. Al igual que con el tráfico de drogas, los cárteles también se están enfrentando entre sí por el control de este lucrativo negocio.
El portavoz del departamento de Tucson (Arizona) de la Patrulla de Frontera de Estados Unidos, George Gómez, ha revelado que los traficantes ofrecen dinero a muchos de estos inmigrantes a cambio de pasar paquetes de droga al otro lado de la frontera. Gómez asegura que los cárteles también emplean a niños para estas labores.