WASHINGTON, 22 (Reuters/EP)
El Gobierno de Estados Unidos aprecia que los legisladores del Congreso norteamericano hayan elaborado un “importante” y “firme” borrador de sanciones contra Irán por su controvertido programa nuclear, un documento que incluye medidas que afectarán a los socios financieros de la República Islámica, informó este lunes el secretario de prensa de la Casa Blanca, Robert Gibbs.
El texto, elaborado por negociadores tanto de la Cámara de Representantes como del Senado para frenar el programa nuclear de Teherán, privaría de acceso al sistema financiero estadounidense a los bancos extranjeros que hacen negocios con determinados bancos iraníes o con la Guardia Revolucionaria.
“Seguiremos trabajando con el Congreso durante los próximos días mientras se finaliza esta importante legislación”, señaló Gibbs, añadiendo que el Gobierno estadounidense seguirá adelante con sus esfuerzos para hacer que Teherán asuma las responsabilidades de su programa nuclear.
El borrador, que incluye sanciones también contra las empresas que proporcionan suministros petroleros a Irán, fue anunciado este lunes en un comunicado conjunto por el senador Chris Dodd y el representante Howard Berman. El texto está circulando entre los negociadores del Senado y de la Cámara de Representantes y tendrá que ser aprobado por ambas cámaras para convertirse en ley.
Algunos destacados legisladores quieren que el Congreso apruebe la propuesta para principios del mes que viene, para reforzar así las sanciones ya existentes contra Irán de Estados Unidos y sumar las últimas aprobadas por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. El objetivo es el cese de las actividades nucleares iraníes, que Washington sospecha están destinadas a la fabricación de la bomba atómica, aunque Teherán asegura que tienen fines pacíficos.
“La ley presenta a los bancos extranjeros que hacen negocios con las entidades iraníes de la lista negra una dura elección --cesen sus actividades o se les negará el acceso fundamental al sistema financiero de Estados Unidos--”, según un resumen de la propuesta.
Las empresas estadounidenses ya tienen prohibido hacer negocios con Irán. Las empresas extranjeras que tienen fuertes inversiones en el sector energético iraní también pueden ser sancionadas bajo las leyes estadounidenses existentes, pero muchos legisladores estadounidenses dicen que estas sanciones no se han aplicado durante años.