El Padre Torres Padilla es bien conocido en La Gomera. No sólo por haber nacido en ella en 1811, sino también porque una escultura le recuerda junto a la iglesia matriz de la Asunción de la capital así como por dar nombre al aula de teología del arciprestazgo insular. Pero también lo es por haber sido el mentor de Santa Ángela de la Cruz y cofundador de las Hermanas de Cruz. Casi un siglo y medio después de su muerte, se inicia su proceso de beatificación y canonización, que dará comienzo este día 5 de mayo en la parroquia del Sagrario de Sevilla.
Según informa ABC, el vicario de la Archidiócesis hispalense, Teodoro León, informó a los sacerdotes y comunidades religiosas de la noticia, primer paso que convertirá al que fue conocido como el Santero de Sevilla en Siervo de Dios. Hará falta un milagro por su intercesión para que sea beato y de un segundo milagro para la canonización.
Huérfano junto a sus tres hermanos, su vida fue ejemplo de servicio a su vocación religiosa. Con 17 años partió de La Gomera a Tenerife y de ahí, tras finalizar sus estudios, a Sevilla, ordenándose sacerdote y llegando ser canónigo de la catedral hispalense y consultor pontificio del Concilio Vaticano I.
En 1862 conocería a la joven Angelita Guerrero, hecho que le llevaría a fundar el Instituto de Hermanas de la Cruz, que hoy se mantiene con el mismo espíritu de entrega y sacrificio. Finalmente falleció en la misma ciudad tal día como hoy, un 23 de abril de 1878, descansando sus restos en la Casa Madre de la Institución cofundada por él mismo.