Es su primera película –“después de tantos años”- y su ilusión es lograr que sea “entretenida y verosímil, creíble, con eso me quedo más que tranquilo”, ha señalado a LA PALMA AHORA el cineasta David Cánovas (Santa Cruz de Tenerife, 1971), que estos días dirige en Madrid el rodaje de ‘La punta del iceberg’, un thriller basado en la pieza teatral del mismo nombre del dramaturgo palmero Antonio Tabares. “Es un proyecto que nació de una manera muy sencilla y nunca pensamos que fuese a ir tan rápido; todos estamos supercontentos porque es un texto muy bueno, del que me cautivaron los diálogos –me parecen fabulosos, fabulosos- y los personajes que creó, que hemos respetado”, afirma.
La obra de teatro ‘La punta del iceberg’ ganó el premio Tirso de Molina y el pasado mes de febrero fue representada en el Teatro La Abandía de Madrid bajo la dirección de Sergi Balbel. En la pieza Tabares aborda el suicidio de tres empleados de una multinacional francesa.
La película de David Cánovas lleva ya 19 días de rodaje en escenarios de Madrid y dentro de seis jornadas concluirá la grabación. En el reparto cuenta con actores de lujo como Maribel Verdú, que encarna a la protagonista, y Carmelo Gómez. “Dirigir a Verdú ha sido una experiencia única, impagable, porque supone trabajar con actores que ya desde la primera toma de lo dan todo y bien, y lo que hacen es aportar, es una pasada rodar con ellos dos, y con los demás, porque Fernando Cayo es excepcional, Bárbara Goenaga, magnífica, y Álex García también lo ha hecho muy bien”. “Maribel está fantástica, espectacular, en todas las tomas, de verdad, y me gusta mucho el registro que tiene para el thriller, funciona muy bien”, insiste.
El cineasta canario reconoce que el proceso de su primera película ha sido “extraño, un poco a la inversa, porque antes de ver el montaje teatral, leí el texto –que me encantó, me entusiasmó- y después escribimos el guión”. “Mi amigo José Amaro Carrillo, que es coguionista, me dijo: ‘Tienes que leer esta obra’, así me fui a la Casa del Libro, me la compré, me la leí y entre los dos decidimos ponernos a escribir”, recuerda. “Cuando tuve la oportunidad de ver la representación de Delirium ya estaba escrita la primera versión; yo ya me había imaginado la película, las voces de los personajes, un montón de cosas, por eso digo que fue un proceso extraño”.
La pieza teatral de Tabares mantiene su estructura en el filme. “Lo que hemos hecho es añadir cosas, enriquecer el personaje principal de Sofía Cuevas, hacerla todavía más protagonista y añadir personajes y detalles que nos dieran una mejor idea de lo que era el pasado de esta mujer y dónde acabaría después de la película”, explica. “Ha sido una ampliación de la investigación de ella a su vida personal, nos metimos un poquito más en su antes y después de la investigación”, precisa.
Cánovas ha destacado que los tres guionistas de ‘La punta del iceberg’ “somos canarios: José Amaro Carillo, de La Palma, fue la persona que me presentó a Antonio y que me hizo llegar la obra teatral, gracias a él la película se está rodando”, sostiene. “Alberto García, de Tenerife, es también muy importante en este guión, porque él aportó la versión final, muchos detalles, el sentido del humor y algunas cositas que han hecho que los actores estén muy contentos con el guión”.
La temática que aborda la pieza teatral -un asfixiante mundo laboral que desencadena el suicidio de trabajadores- convierte a la película en “una obra de actualidad, aunque esperamos que no siga siéndolo, pero en el momento en que estamos rodando sí coincide la realidad con lo que refleja el texto de Tabares”, apunta Cánovas.
‘La punta del iceberg’, de momento, se ha financiado con los derechos de antena de Televisión Española, con la aportación de la productora Tornasol Films y del Ministerio de Cultura. Estará en las pantallas “quizás a partir del mes de mayo o junio, todo depende de si va a algún festival antes de pasarla en las salas comerciales; será o antes del verano justo después”, calcula Cánovas.
Para el cineasta canario y su equipo “ha sido un lujo poder contar con el beneplácito de Antonio Tabares; es muy de agradecer la confianza y la libertad que nos ha dado para hacer lo que nosotros quisiéramos con el texto, que hemos respetado muchísimo, e incluso le propusimos que figurara como coguionista, pero nos dijo que no, que estaba encantando de cederlo; se ha portado muy bien con nosotros”, concluye.