El plan Pevolca vigila de cerca la nueva colada del noroeste que ha ralentizado su avance hacia La Laguna, revela el último informe del Departamento Nacional de Seguridad (DNS) emitido este martes. Además, señalan que ha disminuido la actividad de los principales centros de emisión, que se centra, actualmente, en los focos eruptivos abiertos el pasado domingo.
La calidad del aire ha mejorado y refleja índices buenos en todas las estaciones, excepto en Los Llanos de Aridane y Puntagorda que es regular. Por otro parte, se espera que durante los próximos días se mantenga un escenario favorable para operatividad del aeropuerto.
En relación a la sismicidad, los valores del tremor coincidentes con la actividad magmática han descendido, recuperando su valor bajo. En profundidades intermedias se ha registrado un aumento, localizándose en las mismas zonas y a profundidades superiores a 20 kilómetros, se mantiene a niveles bajos.
El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha localizado durante la madrugada del martes 121 movimientos sísmicos en La Palma, de los que uno ha llegado a magnitud 4,1, y se ha producido a las 06.42 horas en El Paso, y a 40 kilómetros de profundidad.
De los 121 terremotos localizados durante las primeras horas de este martes 78 se han producido en el municipio de Fuencaliente, 42 en Mazo y 1 en El Paso, y las profundidades han oscilado entre los 9 y los 40 kilómetros.
El primer temblor de este martes se produjo a las 00.07 horas en Fuencaliente; fue de magnitud 3,1 y se produjo a 11 kilómetros de profundidad, mientras que el último, de magnitud 2,9, se localizó en Mazo y a 13 kilómetros de profundidad.
Se estima que la superficie afectada por la lava ya alcanza las 1.115,82 hectáreas, con una anchura entre colada de 3.500 metros. Según los últimos cálculos de Copernicus, hasta el momento se han destruido 2.748 edificaciones.