La Federación de empresarios de hostelería y turismo de Las Palmas (FEHT) no ha utilizado la palabra “pandemia” en su último comunicado. Cualquier mención al COVID o al último cierre de fronteras se ha excluido. La organización, en cambio, ha preferido vincular una solución del embudo migratorio con una hipotética recuperación económica en el Archipiélago, reclamando al Estado una “respuesta digna” de la gestión migratoria “capaz de conjugarse con la recuperación económica”.
El comunicado se titula “Proyecto para migrantes, proyecto para Canarias”. En él la FEHT ha querido recordar su “solidaridad” cediendo espacios hoteleros para una acogida digna a los supervivientes de la Ruta Atlántica, aunque esto siempre ha sido, como han recalcado, de forma “temporal, breve y nunca con carácter estructural”. Los campamentos prometidos por el Ministerio de Migraciones el pasado mes de octubre siguen sin estar habilitados en su totalidad, y varios hoteles y apartamentos han tenido que prorrogar sus contratos algunos meses más. En principio, la intención era despejar estos espacios antes de fin de año. Pero eso tendrá que esperar.
Esta no es la primera vez que se produce un flujo de llegadas de pateras con números extraordinarios. En 2006 alcanzaron las costas del Archipiélago más de 30.000 migrantes. Y ese mismo año también pasaron por las Islas más de 10 millones de turistas. El único factor diferencial era que, por aquel año, aún no circulaba un patógeno invisible a los ojos que ha causado 2 millones de muertes y ha perjudicado gravemente la libre circulación de personas.
“Transcurridos seis meses desde la solidaria acogida de Canarias a personas migrantes el Gobierno de España sigue sin ofrecerles una respuesta digna y capaz de conjugarse con la recuperación económica de nuestras islas. Tampoco existe un proyecto, ni para estas personas, ni para la población canaria, tendente a resolver la crisis migratoria que estamos viviendo”, defiende la FEHT.
Y ha agregado: “Requerimos al Gobierno de España para que, de forma urgente, asuma sus competencias y responsabilidades, actúe para dar respuesta a esta crisis migratoria y humanitaria, y atienda a las necesidades inaplazables, tanto de migrantes como de la sociedad y el futuro de la economía canaria. Llevamos meses esperando la actuación humanitaria del Gobierno español, y solidaria con el pueblo canario”.
En una entrevista con el diario EL PAÍS, la vicepresidenta Carmen Calvo dijo que “[España] es un país frontera sur de Europa que está bastante preparado en la frontera del Estrecho”, pero que no pretenden hacer lo mismo en Canarias. “¿Qué es lo que nosotros no tenemos preparado ni queremos tener preparado? A las Islas”. Ahora, con meses de bloqueo en la gestión migratoria, la crispación se ha abierto paso en Canarias y ha florecido la xenofobia y el racismo.
La FEHT ha asegurado que “nuestra estabilidad social y económica se quiebra” y ha demandado “una respuesta humanitaria, ágil, eficaz y satisfactoria para los intereses de Canarias”