Las fuerzas de seguridad portuguesas se han incautado casi 1.500 kilos de explosivo en la casa utilizada por ETA en Óbidos. En los registros se han hallado además varios ordenadores y numeroso material entre el que se incluyen planos de Madrid, el sur de Andalucía y el norte portugués, que está siendo analizados. La incautación de tonelada y media de explosivo supone uno de los mayores golpes de la historia al almacén de la banda terrorista, así como el desmantelamiento de su primera base estable en Portugal.
En concreto, según informó el Ministerio del Interior en un comunicado, en el garaje de la casa que había sido alquilada por los presuntos etarras Oier Gómez y Andoni Zengotitabengoa se han encontrado 1.330 kilos de nitrato amónico distribuidos en doce bidones y cuatro sacos; 75 kilos de nitrato potásico distribuidos en tres sacos; 40 litros de ácido sulfúrico, pentrita, polvo de aluminio y nitrometano.
El arsenal hallado en la casa supera el material explosivo incautado a la banda terrorista en todo 2009. Durante el año pasado, se hallaron hasta 22 escondites de ETA. Del total, 18 fueron desmantelados en Francia y otros cuatro en España. Esto permitió incautar a la banda cerca de una tonelada de explosivos.
Además, en la vivienda se hallaron, entre otros efectos, dos ordenadores portátiles; una carpeta con documentación relacionada con la casa y dos documentos de identificación; una cámara de fotos; una caja de plástico con tres teléfonos móviles con las inscripciones “MADRID”, “PORTUGAL” y “CÁDIZ” y una caja con la inscripción “MUNDO” (se corresponde con un tipo de tarifa telefónica) con una tarjeta SIM prepago.
Planos de Madrid, Cádiz y San Fernado
También aparecieron papeles manuscritos sobre circuitos integrados impresos con el anagrama de ETA, una caja de un ordenador portátil con planos de España y Portugal, tres catálogos de instrumentación científica, otra carpeta con varios planos de Portugal y España con anotaciones manuscritas, un mapa de la región de Coimbra (Portugal). Ya sin anotaciones, los etarras también tenían varios planos de Madrid, Cádiz y San Fernando; de la zona norte de Portugal y anotaciones de horarios autobuses de Cádiz.
Fuentes de la lucha antiterrorista informaron a Europa Press que la de Óbidos no sería la única base estable con la que cuenta la banda en Portugal y apuntan a la posibilidad de más escondites, especialmente en el Norte del país, junto a la frontera gallega.
Los presuntos etarras guardaban también un saco de plástico con pinchos de madera, herramientas, varias cajas vacías que podrían ser utilizadas para confeccionar bombas-lapa, una bolsa con diez pares de guantes de goma y un botiquín de primeros auxilios. En el registro se encontró igualmente una fotografía tamaño carnet del presunto miembro de ETA Oier Gómez Mielgo.
Durante este sábado las fuerzas de seguridad portuguesas han estado destruyendo parte del material incautado en explosiones controladas.
La operación comenzó el pasado día el pasado 1 de febrero de 2010 cuando al detectar un control de la Guarda Nacional Republicana (GNR) en la localidad de Óbidos (Portugal), los ocupantes de una Citroen Berlingo blanca se desviaron por unos caminos perdiendo la placa delantera del vehículo, el cual abandonaron momentos después para huir andando. El vehículo Citroen Berlingo, que portaba una matrícula falsa que correspondía a otro vehículo de la misma marca, modelo y color, fue robado en febrero en la localidad de Castelo Branco.
En el interior de la furgoneta aparecieron varias matrículas de vehículos portuguesas, cuatro detonadores de los habitualmente utilizados por ETA y un ticket de una compra realizada el 17 de enero de 2010 en un supermercado. Una vez que analizado el contenido de las cámaras de seguridad en el establecimiento, se pudo comprobar que el individuo que realizó la compra era Andoni Zengotitabengoa Fernández.
Días después, el 4 de febrero, la Guardia Nacional Republicana de Portugal recibió denuncia de un vecino de la aldea de Casal de Avarela, localidad próxima a Óbidos, que comunicó que una casa llevaba varios días con la puerta principal abierta y las luces del interior encendidas, y que no se observaban movimientos de personas. La vivienda había sido alquilada con documentación falsa española.
Agentes portugueses se personaron en la vivienda y descubrieron que en ella había gran cantidad de material explosivo relacionado con la organización terrorista ETA. Los especialistas policiales trabajan desde entonces en el análisis de todo el material encontrado.
Los vecinos de Óbidos colaboraron con la Guardia Civil a la hora de reconocer a los que hasta hace unos días habían sido sus vecinos a partir de las fotografías mostradas. Además los vecinos aportaron el dato definitivo al indicar a los agentes que los dos huidos utilizaban una Citröen Berlingo. Las fuerzas de seguridad buscan ahora a Oier Gómez y Andoni Zengotitabengoa Fernández, ambos huidos de la Justicia desde hace años tras haber sido condenados por acciones terroristas.
Se cree que habían alquilado la casa rural (un apartamento de un sólo piso con varias habitaciones, característico de la zona), a un angoleño con residencia en Londres que subalquilaba por medio de una inmobiliaria por 450 euros al mes.
Esta operación demuestra que ya hay base probatoria para asegurar que ETA ha logrado implantarse de manera estable en Portugal. Hasta ahora siempre que los responsables políticos o policiales eran preguntados a este respecto, aseguraban que no era una hipótesis que se pudiese descartar dado las dificultades con la que ETA se encuentra actualmente en Francia, pero añadían que no había ninguna base sólida para demostrar la vía portuguesa.