Portavoces institucionales y de las fuerzas políticas han condenado la bomba colocada por ETA esta madrugada en los juzgados de paz de Sestao (Vizcaya), que ha provocado importantes destrozos en sus instalaciones y daños menores en un edificio de enfrente.
El artefacto, compuesto por unos 3 kilos de explosivo y dotado de temporizador, ha estallado en la puerta de los juzgados de paz sobre la una de la madrugada, media hora después de que un comunicante llamara a la DYA de Vizcaya en nombre de ETA para anunciar que, en 30 minutos, haría explosión una bomba en ese lugar.
La Ertzaintza ha localizado una bolsa sospechosa en la puerta de los juzgados, situados en un edificio de la céntrica Alameda Las Llanas, y ha acordonado la zona y desalojado dos establecimientos hosteleras cercanos.
La explosión, escuchada en varios kilómetros a la redonda, ha hecho saltar las grandes puertas de madera de la entrada a los juzgados y ha dejado un socavón de dos metros de profundidad a la entrada de las dependencias, según ha asegurado el consejero vasco de Justicia, Joseba Azkarraga, que ha visitado esta mañana los juzgados.
Las instalaciones, ubicadas en un edificio que alberga otras oficinas municipales, han registrado también la rotura de cristales; ventanas y puertas se han visto desencajadas, y también ha quedado destruido el mostrador de atención al público.
Además, la onda expansiva ha provocado desperfectos en un edificio de viviendas, de cuatro alturas, situado enfrente de los juzgados de paz, en el que, además del portal, se han visto afectadas las ventanas de algunas viviendas y las lunas de comercios situados en los bajos de la casa, como una peluquería, una carnicería y una inmobiliaria.
Este atentado se ha producido un día después de que la banda terrorista ETA hiciese público un comunicado en el que asumía la autoría del asesinato de dos guardias civiles el pasado 1 de diciembre en Capbreton (Francia) y de otros cuatro atentados, entre ellos la colocación de dos bombas, en una trampa para la Ertzaintza, en los juzgados de Getxo (Vizcaya) el pasado 11 de noviembre.
Tras visitar los juzgados atacados, Azkarraga ha manifestado que la bomba supone un “salto cualitativo” en la actividad de la banda terrorista ya que hasta ahora los juzgados de paz eran una institución objetivo de la violencia callejera, mientras que en esta ocasión la autoría ha sido de ETA.
La Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Sestao ha aprobado por unanimidad una declaración de condena del “cobarde atentado” en la que ha subrayado que con estas acciones ETA “pone en riesgo las vidas de gentes humildes y trabajadoras”.
El delegado del Gobierno en el País Vasco, Paulino Luesma, ha dicho que ETA ha actuado contra la Justicia que, “en un momento no muy lejano”, juzgará a “estos asesinos”.
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, que ha transmitido su “condena y rechazo” por “toda la serie de actos violentos que durante estos días se han desarrollado en Euskadi”, incluida la bomba de Sestao, ha afirmado que la sociedad vasca “debe avanzar, con o sin ETA” y ha anunciado que su partido va a iniciar una ronda de contactos políticos y sociales para tratar esta cuestión.
El portavoz de la ejecutiva del PSE-EE, Rodolfo Ares, ha asegurado que “ETA será derrotada por la acción del Estado de derecho y por la repulsa y el rechazo de todos los demócratas”.
El presidente del PP de Vizcaya, Antonio Basagoiti, ha declarado que con atentados como el de esta madrugada en Sestao ETA “se ríe de la firmeza que dice el Gobierno que mantiene ahora contra los terroristas”.
El portavoz de EB, Mikel Arana, ha exigido a ETA que “escuche la voz del pueblo vasco y proceda a su disolución”, mientras que el portavoz de Nafarroa Bai, Patxi Zabaleta, ha exigido a la banda “un cese definitivo, incondicional y unilateral en el uso de la violencia”.