VALENCIA, 17 (EUROPA PRESS)
El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, explica en su libro 'Camisa Blanca' que no es izquierdas, porque vive “en un mar de dudas metódicas”, mientras que en España “proclamarse de izquierdas es sentirse primo hermano de tener siempre razón, creerse justificado en exclusiva por la historia y por la filosofía”.
“A mí tanta seguridad intelectual me fatiga mucho, soy más bien vulnerable ante las buenas ideas de otros y de pensamiento en permanente construcción”, indica González Pons, quien subraya que “nuestra izquierda nunca se ríe de sí misma y cree ostentar cierta legitimidad natural para gobernarnos a todos, repartir diplomas de ciudadanía y decidir qué es progresista y qué no”.
Así lo indica González Pons (Valencia, 1964) en 'Camisa Blanca', que presentará este martes en Valencia. Este libro, prologado por el presidente del PP, Mariano Rajoy, recoge buena parte su itinerario personal y, a la vez, lo que opina “del paisaje y el paisanaje que me voy cruzando por el camino”, escribe el propio autor.
El dirigente 'popular' busca mostrar en las páginas de su libro su “rostro secreto y qué cara refleja el espejo vista desde mis propias gafas”. La transición, el 23-F, el medio ambiente y las nuevas tecnologías, el 15-M, José María Aznar, Adolfo Suárez, Leopoldo Calvo Sotelo y Felipe González, el Rey, el Príncipe, José Luis Rodríguez Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba y Mariano Rajoy son algunos de los principales protagonistas de este memorándum literario-político, según ha informado la editorial Ruzafa Show en un comunicado.
González Pons destaca en la publicación que ganar unas elecciones “da derecho a gobernar, pero no de cualquier forma; confiere la oportunidad de cumplir un programa, pero no sin negociarlo; otorga la ocasión de personificar en el Estado determinadas ideas y valores”, pero, al mismo tiempo, “acarrea la obligación de representar también a quienes no comparten tales ideas y valores”.
Asimismo, insta a transformar el tono del discurso político español. “Ni derrotistas ni héroes, ni perseguidos por la conspiración internacional ni víctimas propiciatorias”, subraya el dirigente 'popular', quien añade que en España “lo épico no es gobernar, lo épico es vivir”.
En materia económica, explica que, en la actualidad, España tiene cinco “grandes retos”, como son la falta de impulso del PIB, el desempleo masivo, la sequía de crédito a las familias y los negocios, las dudas sobre la solvencia del Estado por el déficit público y el exceso de burocracia y tamaño desproporcionado de la administración.
Del mismo modo, considera que Rajoy es el dirigente que “puede sacar a España de la crisis. Con sacrificio, con esfuerzo y paciencia, pero puede”. A su juico, “es el hombre adecuado para la necesidad histórica. Muy listo, muy discreto, muy constante y muy familiar. Además, Mariano es bueno. Buena persona, esa es la verdad”.
En otro capítulo, señala que España necesita recuperar el espíritu de la transición y, para eso, “resulta imprescindible que se escuche más fuerte a los políticos que a sus partidos”. Además, niega que haya “dos Españas”. “Constituimos una patria moderna, unida, joven y participada. De la que sentirnos orgullosos. En la que creer. Por la que matarse a trabajar”, manifiesta.
Respecto a ETA, hace hincapié en que los terroristas “tienen que perder y rendirse”. En esta línea, advierte de que “si aceptásemos alguna de sus exigencias por la llamada paz, igual conseguiríamos que se replegasen, pero la oscuridad de la que salieron seguiría” y, por tanto, “también la posibilidad de que del agujero emergiese en cualquier momento el penúltimo desalmado dispuesto a heredar la metralleta”.
Por otra parte, destaca su defensa de una “radical igualdad de oportunidades” y subraya su “enérgica defensa de la libertad individual”. Por ello, sostiene que el acceso “barato y de calidad” a Internet es “un derecho fundamental”, al igual que “el derecho a ir a la escuela o el de circular por la ciudad”.
FALLAS
En el ámbito más valenciano, González Pons hace hincapié en que las Fallas “significan que, aunque todo pasa y nada permanece, lo que tenga que venir forma parte de nosotros mismos tanto como lo que vayamos a perder”.
“La futura ilusión, el próximo amor, el sueño por soñar, podemos albergar la esperanza de que no sean los últimos”, resalta el exconseller valenciano, quien apunta que “periódicamente todo cambia y el viento encendido se lleva lo que somos y lo que tenemos atesorado, pero también despeja el solar para que empecemos a plantar nuestra siguiente falla”.