El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció este sábado que ha ordenado suspender todas las iniciativas para desarrollar el diálogo con ETA.
Durante una comparecencia extraordinaria en el Palacio de La Moncloa, Zapatero calificó el atentado de este sábado en el aeropuerto de Barajas en Madrid como “absolutamente incompatible” con el alto el fuego que ETA declaró hace nueve meses. “El de hoy es el paso más equivocado e inútil que han podido dar los terroristas”, subrayó el jefe del Ejecutivo.
Ante las preguntas de los periodistas por la posibilidad de que dé por cerrado el proceso de paz de forma definitiva o sólo temporalmente, explicó que “suspensión del diálogo representa que el Gobierno considera, porque es evidente, que no se cumplen las condiciones y presupuestos de la resolución parlamentaria” que avalaba ese diálogo. Tras insistir en que la condición imprescindible “era y es” que haya una “voluntad inequívoca de abandono de la violencia” por parte de ETA, recalcó que hasta que ese supuesto no exista, no habrá ninguna aproximación al planteamiento del diálogo y el Gobierno cumplirá “escrupulosamente” la resolución parlamentaria.
“Lo que ha sucedido este sábado, el gravísimo atentado de la banda terrorista ETA, es radicalmente contrario a esa voluntad inequívoca”, y, por tanto, hasta que en el futuro no exista una voluntad inequívoca, no habrá ninguna posibilidad por parte del Gobierno de aproximar ningún diálogo con la banda ETA“, reiteró.
“Firmeza del Estado de Derecho y de la Ley”
Anteriormente, el presidente del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, instó al Gobierno a explicar si considera que, tras el atentado en Barajas, el alto el fuego de ETA está roto y si, en consecuencia, el Ejecutivo piensa cambiar su política antiterrorista.
“Le pido al Gobierno que suprima cualquier contacto con la organización terrorista ETA”, señaló Rajoy en rueda de prensa en Pontevedra, en la que solicitó además que se pare cualquier negociación con los etarras y que se vuelta “a la firmeza del Estado de Derecho y de la Ley”. El Gobierno tiene la obligación de dar certidumbre a los españoles y tranquilidad al conjunto de la sociedad, según Rajoy, quien aseguró que el PP, por su parte, se reafirma en las convicciones y posiciones que ha venido manteniendo a lo largo de los últimos meses“.
El presidente del PP condenó en su nombre y en el de su propio partido el atentado terrorista ocurrido esta mañana en la Terminal T4 del aeropuerto de Barajas, en Madrid, pidió al Gobierno que exponga si va a cambiar o no la política antiterrorista que ha mantenido a lo largo de todos estos últimos meses. Según Mariano Rajoy, todo apunta a que los autores son miembros de la banda terrorista ETA, “lo que viene a confirmar que es una organización criminal que no quiere ninguna paz ni quiere la libertad de los españoles. Esta es la indudable realidad de los hechos”.
Además, Rajoy manifestó que la prioridad principal de su partido es la derrota de esta organización terrorista, “y que hoy, como siempre, estamos al lado de todos nuestros compatriotas, de todos los españoles que desean, como nadie, el fin de ETA, ya que la han tenido que soportar durante más de 30 años y nunca han aceptado el chantaje de la misma”. El presidente del PP mostró, también, su apoyo a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado “que durante muchísimo tiempo han trabajado de una manera ejemplar para defender los derechos y libertades de todos los españoles”.
Rajoy aseguró que su partido dará su máximo apoyo para que “en el mínimo tiempo posible se pueda proceder a la detención de los autores del atentado terrorista”. Expresó, en su nombre y en el de su partido, la solidaridad con todas las personas que han resultado heridas a causa de la explosión, “y mostrar, también, toda nuestra solidaridad con todas las personas que esta mañana se encontraban en el aeropuerto de Barajas y que se han visto perjudicadas en sus planes por lo ocurrido. Nuestra solidaridad para ellos, para sus familiares y para todos los españoles”.
Mientras, el portavoz de Convergencia i Unió (CiU) en el Congreso de los Diputados, Josep Antoni Duran Lleida, aseguró que tras el atentado el Gobierno no cuenta con su apoyo “para continuar dialogando con ETA”. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) confió en que el atentado “no suponga la ruptura de la tregua” y que el proceso de paz “pueda volver a encarrilarse bien pronto” y no ponga en peligro “una resolución próxima al conflicto que vive el País Vasco”.
El coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, consideró también que el atentado “interrumpe” el proceso de paz y pidió a Batasuna que también lo condene y que haga “una apuesta indeclinable” por este proceso.
Manifestaciones de repulsa
El Sindicato Unificado de la Policía (SUP), mayoritario en el sector, cree que el atentado supone la ruptura del alto el fuego de ETA y, por ello, su portavoz, Maximiano Correal, pidió al Gobierno que paralice “cuantas gestiones estuviera llevando a cabo relacionadas con el llamado proceso de fin de terrorismo”.
También desde la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que convocó una concentración para este domingo en Madrid, su presidente, Francisco Alcaraz, pidió al Gobierno una “respuesta contundente, sin un resquicio de duda, para romper lo que es un proceso de rendición ante ETA”. En similares términos se expresaron otras asociaciones de víctimas, como la Fundación de Víctimas del Terrorismo o Covite, que .pidió a los responsables de los dos partidos políticos mayoritarios que “se unan en pos del bien común considerando que el único enemigo es la banda terrorista ETA y quien la apoya”.
El vicepresidente primero de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, lamentó la “salvajada” cometida en Barajas, en un día en que los ciudadanos tienen programados numerosos viajes, así como que “Madrid sea foco de estas actividades terroristas”. El Gobierno de Navarra hizo un llamamiento “a la unidad de los demócratas como única vía para vencer a quienes intentan conseguir sus objetivos políticos mediante la extorsión y la violencia”.
El Bloque Nacionalista Galego (BNG) hizo un llamamiento a ETA para que abandone su actitud “autista” y escuche la voz unánime de “todos los que no queremos que se frustre el proceso de paz”. Para el Partido Aragonés (PAR), el atentado coloca un “pedrusco” en el proceso de paz y entiende que es un aviso de ETA que quiere tener más implicación en el proceso de paz.
El secretario general de la Chunta Aragonesista (CHA), José Antonio Acero, señaló que “la violencia es incompatible con el actual proceso de paz y con el alto el fuego”.