Bronca en el Congreso con el trasfondo de las prospecciones petrolíferas entre dos buenos gallos de pelea: José Manuel Soria y Patricia Hernández. El ministro de Industria y la próxima candidata socialista de los socialistas canarios a la presidencia del Gobierno regional elegida en primarias protagonizaron un debate repleto de descalificaciones personales que apenas aportó nada nuevo en el terreno de los argumentos a favor y en contra de los sondeos. Aunque eso sí, sirvió a sus señorías presentes en el hemiciclo, o que siguieron el debate desde sus despachos, para calibrar el grado de calentamiento global que ha alcanzado dicho debate en Canarias.
Y es que en el fragor de la refriega, Hernández incluso retó al ministro a competir con ella en las próximas elecciones autonómicas espetándole a Soria que “ya es pasado” y que “no se atreve a enfrentarse en las urnas a los canarios” porque “sabe que no puede volver a ganarlas”. El ministro replicó diciendo que Hernández es una candidata “que no le gustaba a su partido” cuando se presentó a las primarias y que por eso se habrían anulado miles de inscripciones de partidarios suyos en el censo de simpatizantes “diciendo que aquello era trampa y pensando que no iba aganar, aunque a pesar de eso ganó”.
Pero la cosa no quedó ahí: con el desparpajo y el desenfreno que la caracteriza, la diputada por Santa Cruz de Tenerife espetó también a Soria, como de pasada en una de sus réplicas, que “el desempleo es algo que no le afectan ni a usted ni a su entorno”, aunque se esté argumentando que puede ser uno de los beneficios de la extracción de hidrocarburos, aderezado todo ello con acusaciones de “soberbia” y agregando, en alusión a las energías limpias, que “usted no avanza porque está en la posición de los fósiles”.
Soria reaccionaría altivo y furibundo, y exhibiendo el típico orgullo de los funcionarios que han sido opositores al contestar a la joven diputada que si él no tiene desde hace años problemas de empleo es porque en su momento “preparé y gané unas oposiciones al Cuerpo de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado, algo que probablemente usted ni sepa lo que es. Yo no tuve la fortuna de que me hicieran senador a los 23 años sin haber tenido ningun tipo de empleo anterior y así poder llevar en las Cortes generales 11 años con un empleo publico”, agregó queriendo lanzar una carga de profundidad, “esa fue una fortuna que yo no tuve, tuve que hacer unas oposiciones y antes de ser diputado con 54 años tuve que hacer un gran esfuerzo para ganarlas”.
La vicepresidente Celia Villalobos, que entonces estaba dirigiendo el debate, tuvo que llamar al orden varias veces a los diputados que estaban en sus escaños por las protestas que ora llegaban de los escaños socialistas y ora de los del PP. Ya en las últimas réplicas, Hernández concluyó manifestando, bastante fuera de sí, que a ella nadie la había “puesto a dedo” en el escaño en 2004 y espetando a Soria que “a usted y a gente como usted les molesta que gente de origen humilde como yo, lleguemos al Senado, pero se tiene que aguantar”. Soria terminaría diciendo del escaño, ya que en su anterior intervención sólo se había acordado de sus oposiciones, que en su entorno familiar más próximo también hay personas que padecen el desempleo.
Interés general
Por lo demás, antes de que los protagonistas del debate se olvidaran de sus papeles, uno y otro reproducieron los argumentos que ya se conocen. Según dijo Hernández, al defender que se paralicen todas las prospecciones previstas tanto en Canarias como en el Mediterráneo “hasta que valoremos si benefician o no al interés general”, si entre los diputados del PP no hay más oposición a los sondeos es por el sistema de “multas ejemplares” existente en el Grupo Parlamentario Popular. Asimismo consideró que el Gobierno “está precticando una política de hechos consumados” y “su posición al aliarse con los intereses privados de las empresas es muy difícil de explicar”, además de “haber generado ningún puesto de trabajo” en las Islas por el momento.
Además, y como suele ser habitual en estos debates, el ministro recordó la posición favorable a los sondeos “con los ojos cerrados” que en el pasado mostró el actual vicepresidente del Gobierno regional José Miguel Pérez. Asimismo insistió Soria en que “son plenamente compatibles con el turismo” a lo que Hernández replicó diciendo que esas declaraciones de Pérez “en todo caso fueron suyas, pero no del partido” y recordando la posición contraria del presidente de Baleares o del dirigente del PP y diputado por Valencia José Ramón Bauza y José María González Pons, respectivamente.
El ministro también señaló que en España se han llevado a cabo 689 sondeos desde los años 40, de los que 200 han tenido lugar en el mar y 60 han tenido éxito sin que se haya producido nunca un “accidente grave”, al tiempo que subrayaba que la legislación española es incluso “más garantista” que la de Noruega.
Si bien, pese a estar de actualidad en estos días, por las anunciadas perforaciones de la empresa Kosmos en el Sáhara, Soria no recurrió en ningún momento en el debate de hoy al argumento de las prospecciones en la costa africana, la diputada socialista sí lo hizo para decir que en su opinión Marruecos debe “desistir” de hacerlas, pero que lograrlo es tarea que corresponde también al Gobierno de España