El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha insistido durante el pleno de control celebrado en el Parlamento en reivindicar el concepto de “soberanía compartida” dentro de una futura España federal.
Rivero, aprovechando una pregunta del Grupo Popular al respecto, ha asegurado que “según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua, soberanía es la autoridad con la que se ejerce el poder público”.
“Esa autoridad se puede compartir en estados regionalistas o en estados autonómicos, como el actual español, pero la soberanía compartida es la de un régimen federal”, insistió Rivero.
Una explicación que fue rechazada por la portavoz del Grupo Popular, Australia Navarro, cuando aseguró que “la soberanía en España es compartida, si, pero compartida por todos los españoles”.
Navarro insistió en que “lo único que ha cosechado usted es una desautorización compartida”, pues tanto destacados dirigentes y cargos públicos de CC (José Miguel Ruano, Fernando Ríos o José Miguel Barragán) como del PSC (el consejero Francisco Hernández Spínola y el secretario de Organización, Julio Cruz) “se han desmarcado”.
“No tiene contentos ni a los suyos.¿A quien representa realmente ahora el presidente del Gobierno de Canarias?”, concluyó Navarro.
Repartir la autoridad
Pero lejos de arredrarse Rivero aprovechó otras dos preguntas (del nacionalista Barragán y de la presidenta del PSC, Dolores Padrón) para extender sus explicaciones sobre el reparto de la autoridad para ejercer el poder público, según la RAE.
“La sociedad y la clase empresarial apuestan por la soberanía compartida de nuestros aeropuertos”, respondió al nacionalista, y para garantizar que los Presupuestos del Estado dejen de ser “injustos, sectarios y hasta provocadores”, contestó a Padrón.
“Es el momento de que la sociedad canaria en su conjunto reflexione sobre qué papel quiere jugar Canarias en el movimiento de fichas que se está dando dentro del Estado”, ha asegurado Rivero.
Y es que el presidente ha insistido en que “hay que ser cada vez menos dependientes de las decisiones que se tomen fuera [en referencia al Gobierno de España] y reflexionar sobre el nuevo mapa del Estado” que ha abierto el conflicto soberanista catalán y la propuesta federalista del PSOE.