La lucha contra la corrupción y las medidas llevadas a cabo para erradicarla por parte del Gobierno de Canarias ha sido la fuente del enésimo enfrentamiento entre el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, y la portavoz parlamentaria de Podemos, Noemí Santana, que llegó a preguntar al jefe del Ejecutivo: “¿Usted está aquí para hacer política o para hacer negocios?”
Según Santana, el juicio de Las Teresitas está demostrando la connivencia que durante años ha existido entre los poderes políticos y empresariales para “hacer negocios a cuenta del dinero público”, sobre todo por parte del ex alcalde de Santa Cruz de Tenerife y ex senador nacionalista por la Comunidad Autónoma, Miguel Zerolo, y otros ex altos dirigentes de CC.
La portavoz de la formación morada insistió en que “entre 300 y 800 millones de euros se van por el sumidero de la corrupción” en unas Islas en las que “el 40 por ciento de los municipios están salpicados” por escándalos de este tipo.
“Si a eso unimos que Coalición Canaria, según el CIS, es el segundo partido que la ciudadanía percibe como el más corrupto, solo por detrás del PP;que usted se ha definido como un tipo práctico y apolítico y que ha dicho que gobierna para los empresarios, insisto ¿usted está aquí para hacer política o para hacer negocios?”.
Clavijo increpó duramente a Santana, de quien dijo que está usando el Parlamento políticamente para abrir debates que “no tienen nada que ver con el control a este Ejecutivo”, además de que durante su soflama “se ha cargado de un plumazo la presunción de inocencia” de los implicados en el macro juicio.
“La lucha contra la corrupción le compete combatirla a los tribunales de Justicia y a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, y no comparto su actitud de hacer un uso político de asuntos que no tienen que ver con el Gobierno de Canarias”, concluyó el presidente.
Al respecto, la presidenta de la Cámara regional, la socialista Carolina Darias, reconoció que la intervención de Santana no era adecuada porque no versó sobre un asunto de control estricto al Gobierno regional, que es el objetivo del Parlamento, sino que se refirió a cuestiones ajenas al mismo.