La memoria histórica también ha llegado al Debate sobre el Estado de la Nacionalidad de Canarias. Ha sido el diputado de Podemos Manuel Marrero quien lo ha mencionado este miércoles a su discurso para celebrar el trabajo realizado por la Dirección General de Patrimonio del Gobierno regional y reprochar las excusas del alcalde de Santa Cruz de Tenerife para no aplicarlo. En esa ciudad aún quedan por retirar esculturas como el monumento a Franco, así como elementos de otros complejos como el monumento a Los Caídos o el Mercado. El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha insistido en que los vestigios franquistas “tienen que desaparecer todos”.
El alcalde José Miguel Bermúdez (CC) ha polemizado estas semanas con el hecho de que el catálogo de vestigios “solo” incluya de momento a esta ciudad, pese a que el resto de ciudades se han ido poniendo al día y a que se ha garantizado que en un año estará el catálogo completo de toda Canarias disponible. De momento, en la última reunión de la comisión técnica de Memoria Histórica se emplazó a los asistentes a estudiar este extenso estudio durante el período de un mes para plantear propuestas.
En este sentido, Manuel Marrero recordó que el área de Patrimonio Cultural está completando el catálogo de vestigios franquistas. “Es incomprensible que en nuestras calles, no muy lejos de este salón de plenos, tengamos a estas alturas una escultura de un dictador genocida y que un alcalde como el de Santa Cruz de Tenerife siga buscando excusas y resquicios legales para no cumplir con la ley, y lo que es más importante, no cumplir con la reparación legal a las víctimas”, ha asegurado.
Eliminar los vestigios “sin ninguna duda”
Torres ha señalado que ese catálogo de vestigios hay que aplicarlo, es decir, eliminar todos los restos franquistas. “Pero sin ninguna duda”, ha insistido. Porque, “el que duda”, añadió, “crea una sensación de que esto lo puedes dejar aquí cuando resulta que son emblemas que todos hemos decidido democráticamente que tienen que desaparecer” porque pertenecen a “una época que hay que sepultar para que no se vuelva a repetir”.
Además, lamentó que haya quien ha querido polemizar sobre si el Gobierno ha querido ir “a favor de unos o de otros”, en referencia a la polémica encendida por Bermúdez con que el catálogo estigmatiza la ciudad. Torres insistió en que no debería haber dudas por parte de ningún dirigente municipal y que no se deben crear una sensación equivocada.
“Son otros, no los que estamos aquí los que quieren que se queden por lo que representan”, apuntó. Torres recordó además que ninguno de los 70 diputados y diputadas que se encuentran en el Parlamento “quieren que permanezcan esos vestigios del franquismo y de la dictadura del totalitarismo”, insistió.