El Pleno del Parlamento de Canarias ha sido testigo esta jueves de una fuerte discusión entre el presidente de la Cámara, Antonio Castro, y el diputado popular Manuel Fernández, lo que obligó a la suspensión de la sesión durante un periodo de diez minutos.
El origen de la discusión se produjo tras la intervención de la diputada socialista Francisca Luengo, que intervino en el Pleno para hablar sobre la puesta en funcionamiento de la planta de biogás de Salto del Negro, en Gran Canaria.
Tras concluir su intervención y regresar a su escaño, la parlamentaria solicitó la palabra a la Presidencia para dejar constancia de que había sido insultada por miembros del Grupo Popular, un hecho que, recalcó, se repite cada vez que interviene en sesión plenaria, de ahí que pidiese un mayor respeto hacia su persona.
Este hecho encolerizó a los miembros de la bancada popular, que inmediatamente solicitaron a Antonio Castro el uso de la palabra. No obstante, el presidente de la Cámara Legislativa, no dando lugar a la petición, quiso dejar claro que “todo diputado de esta Cámara merece un respeto”.
Fueron precisamente estas palabras las que enervaron al diputado Manuel Fernández, quien en repetidas ocasiones pidió intervenir para decir que no había insultado a nadie. “¡Es mentira!”, gritó desde su escaño el parlamentario, quien llegó a exigir a Antonio Castro que le llamara al orden. Fue entonces cuando el máximo responsable de la Cámara decidió suspender el pleno por 10 minutos ante este comportamiento.