La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), que inició la búsqueda científica de desaparecidos por la represión franquista en el año 2000 en el Bierzo, y promovió la querella argentina contra el franquismo asegura que hará lo posible por retirar el monumento a Franco de Santa Cruz de Tenerife. Este miércoles solicitó personarse en el expediente de declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) del complejo escultórico; un trámite inciado por el Cabildo (Coalición Canaria y PP) para cumplir con una sentencia, pero que ha aprovechado para promover su resignificación como monumento “a la concordia”.
La asociación señala que la “solicitud de audiencia” para personarse en el expediente ha sido tramitada a través del registro del Cabildo de Tenerife que “ahora tendrá que responder si se trata de un proceso con total transparencia y participación ciudadana o no”, señala en un comunicado. Adjunta además un documento en el que expone los motivos por los que se persona ya que su objetivo es “promover la lucha por la justicia para las víctimas de la dictadura franquista, mediante cualquiera de los medios permitidos por la ley”.
“Haremos todo lo posible para la retirada de un monumento construido para humillar a las víctimas del franquismo, porque hay leyes que lo dicen pero especialmente porque la cultura democrática es incompatible con la exaltación de quien encabezó un golpe de Estado para asaltar el poder violentamente, asesinó a más de 2.000 civiles republicanos canarios y dejó un país sembrado de cadáveres, mucho de los cuales todavía están desaparecidos”, anuncia Emilio Silva, presidente de la ARMH.
El nieto del primer desaparecido de la represión franquista identificado genéticamente critica a “todos esos políticos que son incapaces de empatizar con quienes vivieron durante cuarenta años bajo un régimen de terror y no pudieron enterrar a sus seres queridos porque los franquistas secuestraron sus cádáveres y luego se llenan la boca hablando de las víctimas del terrorismo”.
Así mismo, añade que “en España no ha habido mayor terrorismo ni más violento que el que practicaron los pistoleros de Franco”.
Una semana llena de críticas a las decisiones del Cabildo
Además de esta asociación, el Gobierno central también ha anunciado que se persona en el expediente para declarar BIC del monumento a Franco. El ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, ha señalado que incoar ese expediente no quiere decir que la escultura sea BIC.
El ministro hace estas declaraciones después de conocerse que el Cabildo de Tenerife no solo ha iniciado los trámites para proteger el monumento, sino que ha propuesto renombrar la escultura como Monumento para la Concordia y resignificarlo como “un espacio de memoria que promueva la paz y el entendimiento entre los ciudadanos”.
La noticia ha tenido una lluvia de críticas incluso por parte del propio Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, gobernado por los mismos partidos y que ha peleado incluso en los tribunales contra el Catálogo de Vestigios Franquistas que concluía que esta estatua no se ajusta a las leyes de memoria histórica.
La asociación de Memoria Histórica de Tenerife, la oposición y personas expertas han cargado contra la idea del Cabildo de renombrar el monumento a Franco. “¿De la concordia de quién, de todos los que desaparecieron el 18 de julio de 1936 y después de la dictadura? ¿la concordia de las familias que dejaron sin hermanos, sin padres y sin hijos?” se pregunta la presidenta de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Tenerife, Mercedes Pérez Schwartz, que afirma estar decepcionada y que esta propuesta es “impresentable”.
La coordinadora del Catálogo de Vestigios Franquistas de Santa Cruz de Tenerife y catedrática en Historia del Arte de la ULL, Maisa Navarro, ha señalado a Canarias Ahora que es una “indecencia” que se proponga esa resignificación. La experta aclara a este periódico cuáles son los elementos que habría que retirar porque son “contrarios a la verdad histórica” como la base de la escultura (representación de la isla de Tenerife), el 'Dragon Rapide', el avión en el que Franco voló desde Canarias a Marruecos para iniciar el golpe de Estado; la figura de Franco “como cruzado medieval”, ataviado con capa y espada, y los nueve escudos de los partidos judiciales provinciales como representación de un “apoyo legal a la Guerra Civil como justa y legal”.