La calle Afilarmónica Nifú Nifá, en Santa Cruz de Tenerife, ha sufrido una metamorfosis que no ha sido del todo bien acogida por sus vecinos. El ayuntamiento capitalino ha eliminado una veintena de aparcamientos e incluso una acera de la céntrica calle que tiene a su alrededor restaurantes, discotecas, un museo, una biblioteca pública y numerosas asociaciones de murgas y comparsas carnavaleras.
Estas obras comenzaron el 19 de septiembre de 2022, tres meses más tarde, la calle ya ha sido abierta al público.
El concejal de Servicios Públicos y Medioambiente, Carlos Tarife, ha anunciado la finalización de esta reforma a través de sus redes sociales. Sin embargo, las reacciones por parte de la población tinerfeña no han sido positivas.
Un usuario responde al concejal de manera clara. “¿Qué hacemos con el coche?”, dice. Recuerda que ya son varios proyectos en los que se han eliminado los aparcamientos, incrementando aún más esta problemática en la ciudad.
Otro usuario hace hincapié en la manera en la que se ha construido la nueva acera, pues opina que puede ser peligroso para los invidentes: “Los bordillos son seguridad”.
Varios vecinos han expresado su descontento por las zonas de sombra que antes dejaban los árboles sobre los vehículos y que han tildado de “tan necesarias en la ciudad”, también por el tipo de aceras; por el pequeño jardín que ven como “una mega maceta que ocupa el espacio de los aparcamientos”... pero todos coinciden en una cosa: la ciudad está llena de proyectos que buscan quitar los aparcamientos, cuando la realidad es que el número de coches aumenta cada día.
Tal y como detalla Diario de Avisos, esta calle se incluye dentro de la zona de bajas emisiones que prepara el Ayuntamiento de Santa Cruz, que reducirá la circulación de vehículos, estableciendo controles de acceso y peatonalizando diferentes calles.
Aparcamientos en la Rambla de Santa Cruz
Recientemente el ayuntamiento ha eliminado las plazas de aparcamiento ubicadas en el tramo final de la Rambla de Santa Cruz, concretamente entre la calle San Isidro y Comandancia de Marina. Esta ha sido una medida calificada por muchos ciudadanos como “positiva”, ya que permite la circulación real de dos carriles que antes resultaba imposible por los vehículos que se encontraban estacionados. Sin embargo, vuelve la misma problemática, la poca oferta de plazas de aparcamiento públicas en las calles de la capital, obligando a muchos a estacionar sus vehículos en aparcamientos privados y de pago.
Zona de Bajas Emisiones
Santa Cruz de Tenerife espera tener su Zona de Bajas Emisiones (ZBE) a finales de 2023, después de un periodo de ejecución de 22 meses (contando desde octubre de 2021). Pese a que en un primer lugar se indicó que las restricciones deberían estar en marcha el 1 de enero, los consistorios todavía no cuentan con todos los estudios y licitaciones necesarias, por lo que retrasarán esta fecha hasta diciembre de 2023.
El borrador del proyecto indica que el perímetro de la ZBE lo marcan las tres principales vías de la urbe y el eje natural del barranco de Santos. En un mapa presentado a los fondos europeos Next Generation, se ha establecido un perímetro delimitado por las calle Ni Fú Ni Fá, Ramón y Cajal, parte del puente Galcerán, plaza Weyler, Méndez Núñez hasta el Cuartel de Almeyda, parte de la Rambla, avenida de Anaga y avenida Marítima hasta el Museo de la Naturaleza y Arqueología.
Con respecto a la nueva norma, Santa Cruz explica que apostará por otro tipo de movilidad enfocado en el transporte público, la bicicleta o los vehículos de movilidad personal. Además han adquirido guaguas eléctricas y distribuirán carriles bici por toda la zona de bajas emisiones con líneas que penetrarán en el centro.
La capital es el municipio que más licitaciones ha publicado para poner en marcha la zona de restricciones y cuenta con 9,4 millones de euros de inversión provenientes de los fondos europeos.
Por el momento se desconocen las multas que regirán y las etiquetas de los vehículos que podrán entrar pero algunos ayuntamientos ya se encuentran estableciendo el mapa de calles que incluirán dentro de la Zona de Bajas Emisiones.
Señalización
Se usará una nueva señal vertical creada por la Dirección General de Tráfico, de fácil identificación y que permita a los ciudadanos saber que se aproximan o acceden a una ZBE, así como las restricciones de circulación que les afectan.
La señal informa que está prohibida la entrada a vehículo de motor, excepto aquellos vehículos que dispongan del distintivo ambiental indicado por la entidad local en la parte inferior de la señal. Además, se instalarán paneles informativos interactivos.
Sanciones
El acceso no permitido a una Zona de Bajas Emisiones constituye una infracción grave, que será sancionado con multa de 200 euros (100 euros si es caso de pronto pago, si se abona en los primeros 20 días naturales). Esta sanción no conlleva retirada de puntos del carnet de conducir.
Vehículos profesionales
Los vehículos de servicio público, como taxis y autobuses, deberían poder circular sin restricciones, así como aquellos vehículos que trasladen a personas con movilidad reducida. Un punto que va a ser importante decidir en la regulación es el grado de permeabilidad que tendrán los vehículos de reparto de mercancías sobre la ZBE.
En ciudades como Barcelona o Madrid se han establecido franjas horarias para que puedan acceder y se prohíbe el paso a los repartidores fuera de esas franjas, siempre y cuando no circulen en vehículos considerados limpios (a excepción de los que entregan medicamentos a centros sanitarios, oficinas de farmacia y centros de vacunación).
Cuando se apruebe la ordenanza municipal que regule este aspecto, quedará aclarado qué va a ocurrir con los vehículos profesionales y también con los personales en la ZBE de Santa Cruz de Tenerife.