El Ayuntamiento de Utrera (Sevilla) ofrece a cerca de sesenta vecinos que residen en la barriada de la Coronada las casas “más baratas del mundo” por tan sólo 1.200 euros, con el fin de poder adquirir en propiedad las viviendas, en las que residen en alquiler desde hace más de cuarenta años, y escriturarlas a su nombre.
Así lo dio a conocer, en declaraciones a Europa Press Televisión, el alcalde de la localidad andaluza, Francisco Jiménez, quien explicó que la iniciativa surgió a raíz de las peticiones de “muchos” de estos vecinos de poder adquirir las viviendas en las que residían en alquiler, así como de las “difíciles situaciones” que algunos de ellos estaban padeciendo al fallecer los “propietarios originarios” de las mismas.
Ante esto y para acometer la regularización de las viviendas, “porque muchos no tenían título de propiedad”, han lanzado esta oferta que consiste en la venta por parte de la Junta de Andalucía de las sesenta viviendas “al módico precio de 1.200 euros”.
Se trata, dijo Jiménez, de viviendas de unos “60 ó 70 metros cuadrados, que tienen ya sus años pero que reúnen las condiciones idóneas para vivir”, a lo que sumó que los vecinos van a tener la garantía de titularidad de las mismas.
Una vivienda, al precio de un metro cuadrado
“Exagerando un poco podríamos decir que son las casas más baratas que se pueden adquirir en toda España y quizás en todo el mundo. Comparativamente, un metro cuadrado de una vivienda de protección oficial en Utrera cuesta 1.200 euros, por lo que están adquiriendo realmente una vivienda al precio de un metro cuadrado construido”, manifestó.
En cuanto a la forma de pago, Jiménez aseguró existen dos opciones. La primera de ellas consiste en abonar “de manera inmediata, en el plazo de un par de meses” el precio fijado para cada vivienda que es de 1.174,64 euros, más 46,99 euros de IVA y unos 300 euros que corresponden a la escritura de las residencias. O bien, explicó, pagar a lo largo de todo un año, “en módicos plazos”, unos 88 euros, “pero el problema es que esta opción supera al final del año los 1.200 euros”.
Por ello, algunos vecinos de la localidad han mostrado su disconformidad con esta oferta. Así, Manoli Sánchez admitió que aunque “el precio al contado está muy bien”, son pocas las facilidades de pago. “Nos dan muy poco tiempo, sólo un mes para poderlo pagar. Además, en el plazo de un año llegaría a los 2.000 euros”, señaló, a lo que sumó que en la barriada viven “muchas familias numerosas” y algunos se encuentran en situación de desempleo.
Por último, otra de las vecinas que se beneficiarán de esta oferta, Vanesa Ginés, opinó que le parece “bien” la iniciativa, pero coincidió en afirmar que “son pocas las facilidades” para pagar la compra de la vivienda para familias, en general, con pocos recursos.
“Hay gente que está de acuerdo y otras que no, pero si no las compramos nos echan a la calle. Si nos hubieran dado varios meses para reunir el dinero podríamos pagarlo del tirón, pero en un mes no podemos reunirlo”, lamentó. No obstante, añadió que “son las casas más baratas del mundo pero son pocas las facilidades de pago con la actual crisis”, lamentó.