Un total de 174 tramos de carreteras catalanas continuaban a primera hora de la mañana de este martes afectados por el temporal de hielo y nieve, de los que 39 están cortados, según informaron fuentes del Servei Català de Trànsit (SCT).
La provincia con mayor número de vías afectadas es Lleida, con 90, seguida de Barcelona, con 46, Girona, con 31, y Tarragona, con siete. En cambio, es Barcelona, con 18, la que tiene mayor número de tramos cortados.
Entre las carreteras que permanecen cortadas figuran la AP-7, entre Maçanet de la Selva y la frontera francesa; la N-II, en Vidreres, entre Caldes de Malavella y Bàscara, y entre Tordera y Palafolls; la C-25, entre Cervera y Riudellots; la C-28, entre Naut Aran y Alt Àneu; la C-31, en Castell-Platja d'Aro; la C-66, en Besalú, y la C-38, en Molló.
También hay restricción para camiones en la AP-2 y la A-2, en Soses; la C-16 y la C-58, en Vacarisses; la N-230, en Vielha e Mijaran, y la A-26, entre Olot y Besalú, entre otras.
Trànsit prevé que la situación del tráfico irá mejorando progresivamente al dejar de nevar, pero alertó de la formación de placas de hielo.
Precisamente, en la C-33, a la salida de Barcelona, se produjeron esta mañana tres accidentes provocados por placas de hielo, una circunstancia que se ha repetido en otras vías como la C-58.