La Catedral de Las Palmas de Gran Canaria acogerá, el próximo 30 de agosto, un funeral en memoria de las víctimas del accidente aéreo de Barajas. Las autoridades canarias, junto con el Obispado, manejaban dos fechas, pero finalmente la ceremonia tendrá lugar el penúltimo día de este mes a petición de la Casa Real, que estará representada en la cita por alguno de sus miembros.
Así lo afirmaron fuentes de las autoridades reunidas este sábado en la Delegación del Gobierno, que contó con la asistencia del director de Relaciones Institucionales del Gobierno canario, Manuel Martínez Fresno, de los alcaldes de los municipios afectados por la tragedia, responsables del Cabildo de Gran Canaria y del Ejecutivo estatal.
Todos los asistentes estuvieron de acuerdo en celebrar el acto religioso cuanto antes, para no prolongar el dolor de las víctimas, así como dar prioridad a las necesidades de las familias, explicó a Efe Manuel Martínez.
Asimismo, todos atendieron a la petición del Obispo de alejar la fecha de este evento lo máximo posible de la festividad de la Virgen del Pino por no considerarlo emocionalmente aconsejable.
Cabe la posibilidad de que el funeral de Gran Canaria se celebre antes que el previsto en Madrid, lo que no supone un impedimento protocolario puesto que son dos actos para familias distintas, pues las de Canarias no asistirán a la misa que se celebrará en la capital española, explicó.
Presencia de la Casa Real
La Casa Real indicó asimismo que no hay inconveniente alguno en cuanto a que el funeral en Gran Canaria sea antes o después del que se celebre en Madrid, pues no es un funeral de Estado, y el único requisito es la disponibilidad para poder viajar a Gran Canaria, pues han mostrado mucho interés en poder asistir, aseguró Martínez.
Las autoridades hoy reunidas estuvieron de acuerdo en que las decisiones que se tomen tengan en cuenta sobre todo a las familias de los fallecidos, por lo que se reducirá al máximo la presencia de políticos y autoridades y se procurará reservar para los allegados el máximo espacio posible en el interior de la Catedral de Santa Ana, que acogerá la misa funeral.
En cualquier caso, se desplegará un dispositivo y se habilitará la Plaza de Santa Ana para acoger a los ciudadanos que quieran asistir a este homenaje religioso que Canarias ofrecerá a las víctimas del avión siniestrado el pasado miércoles.