La futura ciudad del cine de Fuerteventura, Dreamland Studios, pretende ser el “mayor y más ambicioso” proyecto audiovisual y cinematográfico desarrollado en España. Sin embargo, según se desprende de su propio estudio de viabilidad, los estudios de cine de este parque temático solo ofertarán 17 empleos directos. Una cifra que podría aumentar “en función de la evolución que experimente el negocio”. La construcción ha sido declarada bien de interés insular por el Cabildo, pero se ha visto envuelta en polémica desde que salió a la luz pública por ocupar 160.001 metros de suelo rústico común a 440 metros del Parque Natural de las Dunas de Corralejo.
Entre estos 17 puestos de trabajo figuran dos gerentes, dos secretarios generales, dos jefes técnicos, un asistente técnico para redes y telecomunicaciones, dos asistentes técnicos para luces y sonido, dos coordinadores de proyectos, un contable, tres ayudantes de producción, y un técnico y un ayudante de producción para el uso del water tank (tanque de agua) de los estudios.
Según el estudio de viabilidad, el total de empleos directos que ofertará el ya bautizado como Hollywood de Canarias alcanza los 129 puestos de trabajo. Estos se reparten entre los estudios de cine (17 empleados), el parque temático de realidad virtual (90), la academia de formación (6) y las instalaciones del parque (16). El 69% del personal contratado desempeñará tareas de gestión de las visitas de los turistas, de limpieza, de mantenimiento y de administración.
Esto contrasta con los objetivos recogidos en la memoria justificativa del proyecto, que indican que se fomentará la creación de industria audiovisual mediante la generación de empleos de alta cualificación en las nuevas tecnologías de la sociedad de la información, “posibilitando la aparición de puestos de trabajo relacionados con la industria audiovisual, cinematográfica y de desarrollo de contenidos de realidad virtual”.
Baile de cifras
Aunque el estudio de viabilidad y la memoria justificativa del proyecto fueron firmadas el mismo día por el promotor, José Antonio Newport, las cifras sobre empleo varían en ambos documentos. La memoria justificativa, presentada para solicitar la declaración de bien de interés insular, habla de 150 puestos de trabajo directos y de 10 empleos directos en los estudios de cine.
En un comunicado lanzado el 27 de enero de 2021, Newport habló incluso de 400 puestos de trabajo tecnológico directo de alta cualificación en una primera fase, con una proyección de 1.000 puestos indirectos. Sin embargo, ni en la memoria ni en el estudio de viabilidad se cuantifican los empleos indirectos que generará el parque cinematográfico.
Desde Dreamland Studios han aclarado a esta redacción que el proyecto, al ejecutarse en varias fases, crecerá en la oferta de empleo de manera progresiva. ''En la primera fase se estiman entre 150 y 175 empleos directos, y funcionando al 100% habrá empleo para un número superior a 800 personas, entre la parte de cine, la de formación y la de tecnología'', apuntan.
Además, insisten en que el empleo será cualificado y para ello ''se formará a todo el alumnado en el centro de formación con todo lo relacionado con el cine''. Dreamland asegura que más de 300 empleos estarán orientados al cine, directa o indirectamente.
En una nota de prensa publicada este martes, Dreamland asegura traerá “al presente la mayor empleabilidad del futuro”. Además, aseguran que los estudios “colocarán a las islas a la cabeza de Europa en la creación de contenido audiovisual” y “potenciarán la generación de empleo”.
El comunicado apunta que la empleabilidad “irá creciendo” conforme avance el proyecto hasta llegar a los 900 empleos estimados. También insisten en que Dreamland tendrá un “efecto tractor” en la sociedad de Fuerteventura y en Canarias, requiriendo “cientos de servicios externos”.
Bien de interés insular
Para que esta ciudad del cine pueda ser construida en suelo rústico, los promotores y el Cabildo de Fuerteventura han recurrido a la Ley 4/2017 del Suelo y de los Espacios Naturales Protegidos de Canarias. Esta norma contempla en el artículo 77 que, cuando las construcciones carezcan de cobertura expresa en el planeamiento, “su autorización por licencia requiere de la previa declaración por el Cabildo insular de interés público o social”.
Así, el 28 de noviembre se aprobó la declaración con el voto de calidad del presidente del Cabildo insular, Sergio Lloret, y los votos a favor del PSOE, Podemos, Nueva Canarias y Asamblea Municipal de Fuerteventura (AMF).
El uso de suelo rústico para esta construcción y su proximidad a las Dunas de Corralejo despertaron el rechazo de algunos sectores políticos, ambientalistas e incluso empresariales. El pasado 10 de enero, la Asociación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Fuerteventura (Excelfuert) reconoció que la ubicación en la que se proyecta Dreamland “no es la más apropiada”. Así, instó a las fuerzas políticas a consensuar la localización de este proyecto ''estratégico para la economía insular''.
Desde el 28 de diciembre, el proyecto Dreamland Studios se encuentra en fase de Información Pública. De este modo, la ciudadanía puede presentar alegaciones e informes en el registro general o en el registro electrónico del Cabildo de Fuerteventura en un plazo de 30 días hábiles.