Los trabajadores de la empresa Videoreport, que elabora los servicios informativos de la Televisión Autonómica de Canarias (TVAC), consideran “gravísimo” que el presidente del Ejecutivo regional, Paulino Rivero, reconociera este jueves que desconoce el problema “de fondo” que ha provocado la huelga que han comenzado este viernes.
Uno de los portavoces del comité de empresa, Miguel Quintana, recordó que cada año el Gobierno de Canarias abona 18 millones de euros a Videoreport para que lleve a cabo la programación de la que fue adjudicataria mediante concurso público. “Si yo fuera el presidente”, señaló Quintana, “me preocuparía de saber qué pasa con ese dinero y porqué los trabajadores están en el huelga”.
A primera hora de este viernes miembros del comité entraron en las sedes del ente público en las dos Islas capitalinas tras lo que, “ante la pasividad mostrada por el personal”, a mediodía una parte representativa de la plantilla en huelga ha tomado la misma decisión y se encuentran “en los pasillos” de las oficinas como modo de protesta.
Quintana, que se encuentra en la sede el ente público de la capital grancanaria, indicó que “son alrededor de medio centenar” de trabajadores los que permanecen en las dependencias anteriormente citadas, de las que no saldrán “hasta que se produzca una mediación efectiva”.
En este sentido, recuerda que la voluntad del comité “es que el Gobierno se inmiscuya”, ya que la huelga tiene como finalidad “defender los derechos de los trabajadores” pero también “la de los ciudadanos, ya que deben conocer si existe una correcta gestión de los 18 millones de euros que el Gobierno canario le paga a esta empresa”, en referencia a Videoreport.
La masa laboral de Videoreport comenzó este viernes su primera jornada de huelga, que se extenderá también durante toda la jornada del sábado, después de que se rompieran las negociaciones del I Convenio Colectivo de Videoreport Canarias, lo que ha llevado a que la empresa “de forma unilateral” haya aplicado desde el pasado 1 de abril el Convenio marco de las empresas del Sector Audiovisual.
“Nuestros salarios se verán reducidos en un 50%”, lamentó Quintana, que insistió en que en “en ningún caso” demandan aumentos de sus retribuciones sino “unas condiciones dignas y que se respete nuestro anterior convenio colectivo”, cuyas condiciones Videoreport subrogó tras la finalización de la prestación de servicios por parte de la anterior adjudicataria, Socater.