El esfuerzo que realiza la defensa de Minerva, la joven grancanaria que fue detenida por segunda vez este martes por el presunto secuestro de su hijo al traérselo desde Alemania por los supuestos malos tratos de su marido, podría dar sus frutos en las siguientes horas. Sus abogados intentan que la Fiscalía alemana retire la orden europea de detención y extradición dictada y, según estos, hay palpables posibilidades de que esto pase.
Para ello, dos fiscales de Munich tienen que dar su visto bueno. Por un lado, el fiscal al cargo de las extradiciones y por otro el que lleva la causa penal promovida por la denuncia del padre. “Estoy convencido de que a este caso se le va a empezar a dar la vuelta dentro de poco y se descubra toda la verdad”, sostiene el abogado de la joven grancanaria, quien pone en relevancia que para que exista delito de sustracción de menores se tiene que infringir la guardia y custodia del niño, aspecto que, según este, “no ha ocurrido”.
Además, asegura que el padre falsificó datos en su denuncia ?concretamente el periodo de residencia en Alemania- para que la policía alemana pudiese considerar que hubo secuestro del menor y ordenase en agosto pasado la detención y entrega de Minerva con tan solo el testimonio de su esposo, Nicky Ch.
Minerva fue citada en la 'Supercomisaría' de Las Palmas de Gran Canaria este martes para ejecutar la orden europea de detención y entrega a la justicia alemana. Actualmente se encuentra en prisión preventiva en la cárcel Gran Canaria 2, situada en Juan Grande, y de dilatarse el procedimiento, podría permanecer hasta diez días allí recluida.
Según la defensa, para que se dicte prisión preventiva es necesario que el Juzgado de Instrucción decida sobre su situación personal y le remita la decisión a la Sala de la Audiencia Nacional, ya que esta no tiene competencia para obrar al respecto. Aunque así fuere, según la Ley de Enjuiciamiento Criminal, antes de dictar prisión preventiva es necesaria una comparecencia con la acusada y el Ministerio Fiscal. “Ninguno de estos dos hechos se ha producido”, mantiene la defensa.
Minerva, desde que fuese puesta en disposición de la Audiencia Nacional y el juez Gómez Bermúdez le otorgase un plazo de libertad de 60 días para dilucidar las dudas que emanaban del caso, ha permanecido libre, mostrándose colaborativa con la justicia y personificándose siempre que se le ha requerido. Sin embargo, la Audiencia Nacional la ha puesto en prisión preventiva, se entiende, para evitar riesgo de fuga. Uno de los abogados de Minerva mantiene que su privación de libertad de forma provisional se debe a la necesidad de que esté disponible para la posible entrega a los juzgados alemanes. “Por comodidades no se puede decretar prisión provisional”, sostiene.
Ante ello, la defensa presente en Las Palmas de Gran Canaria ?siempre y cuando la Fiscalía alemana no retire la orden de detención y entrega- tiene previsto presentar un Incidente de Nulidad y, si este no prosperase, pedirán el amparo del Tribunal Constitucional.
El marido “la tenía encerrada” en Alemania
Minerva puso una denuncia por malos tratos psicológicos de su marido nada más pisar suelo español, pero el juez de Vigilancia de Las Palmas de Gran Canaria a quien correspondió la causa, Luis Ocaña, no la admitió a trámite. La defensa de Minerva ha afirmado a CANARIAS AHORA que el presunto maltratador la tenía encerrada en su casa de Munich, impidiéndole que pudiese salir por las calles alemanas.