Un ciudadano austríaco de 53 años cayó al mar el jueves pasado desde unos acantilados en la isla de La Gomera mientras paseaba con su perro, y el can continúa desde entonces buscando a su dueño, que tampoco ha sido localizado por los efectivos de Salvamento Marítimo y de la Guardia Civil que rastrean la zona.
Fuentes de la Policía Local de San Sebastián de La Gomera informaron de que el perro, de color blanco y de mediana edad, sigue olfateando la zona y no abandona el lugar en espera del regreso de su dueño, que reside desde hace ocho años en Valle Gran Rey y trabaja en la construcción.
El hombre se precipitó desde unos acantilados de las playas del Medio, en la localidad de Playa Santiago, y fue el perro quien alertó con sus ladridos de la desaparición de su amo a varias personas que se encontraban por las inmediaciones.
Se trata de una persona tranquila que llevaba varios días en las playas del Medio aparentemente de vacaciones, lugar donde suele acudir a menudo, y en la zona alta del acantilado se encontraron dos garrafas de agua y una bolsa con comida, indicaron las mismas fuentes.
Los efectivos de tierra han conseguido llegar hasta la mitad de la ladera, un paraje escarpado y de difícil acceso, donde se encontraron restos de sangre, tabaibas rotas y monedas dispersas, por lo que se piensa que el hombre pudo caer al mar desde ese lugar, a más de 150 metros de altura sobre un suelo rocoso salpicado por el fuerte oleaje.
La embarcación de Salvamento Marítimo Salvamar Alphecca y buceadores del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) reanudaron este sábado la búsqueda del desaparecido.